domingo, 17 de junio de 2012

UN REGALO PARA LOS SENTIDOS, DESDE LOS ALPES SUIZOS A LA TOSCANA




SUIZA

Viernes 29 de Junio de 2012
MORALZARZAL- ZARAGOZA
SALIDA FRENÉTICA

Hoy empiezan nuestras vacaciones. Después de un día frenético y dejando un despliegue incesante de logística atrás, sobre todo en estos últimos días, emprendemos nuestro viaje a Suiza.
Tenemos por delante 24 estupendos días de descanso que vamos a intentar amortizar relajando nuestros sentidos en un país repleto de placeres para la vista, el gusto, el oído, el tacto y el olfato. Estoy segura que será emocionante para los peques y sobre todo divertido, muy divertido.

Son las 18.00 horas y nuestra cv está enganchada al coche con la nevera a tope y los armarios más a tope aún. Parece que donde vamos no hay supermercados, es más nuestro caracol (como le llama Boni), se lleva la casa a cuestas. Hemos ido abasteciéndola en estos días de lo que creemos será de utilidad en una ruta que se centrará básicamente en tres regiones Friburgo, Oberland Bernes y Valay, así que el viaje es pretencioso y hay que optimizar recursos. Suiza es caro y nosotros queremos ajustar nuestro presupuesto al máximo.

Mi hermano y mis sobrinas salen para casa de mi amiga Monica que nos ha cedido su espacio y electricidad para acoplar la cv de Juancho. Eso no tiene nada que ver para que el domingo nuestra rivalidad prevalezca en la final de la Eurocopa España- Italia.

Mis padres, pacientemente, que han venido a ayudar con los niños, soportan alguna salida de tono que otra. Son muchas cosas y el nivel de estrés se dispara pero ya está todo preparado. En la salida,¡ los Trives con Miguelón incluido! Han venido a despedirse y nos han regalado un cargamento de bollitos de fresa y chocolate que Sandra había prometido a Adrián. Entre gritos, abrazos, prisas y sonrisas intentamos despedirnos de todos. Es como el camarote de los hermanos Marx pero sin Groucho. Nuestros amigos son geniales, nos transmiten una ilusión y un ánimo encomiable. Prometemos acordarnos mucho de todos vosotros.

Tenemos por delante 360km hasta Zaragoza que es la primera parada que hemos elegido para pernoctar esta noche. Cuando estamos llegando a la altura del Instituto a Boni le asalta el típico trastorno obsesivo-compulsivo TOC que imagino tienen casi todos los individuos de esta sociedad Occidental tan atacada: ¿llevamos todo? Tengo la sensación que me dejo algo – me pregunta. La cabeza no es, porque la lleva, o por lo menos eso es lo que parece que tiene encima de los hombros. ¡Ah sí ya se acuerda! Una pequeña menudencia, algo sin importancia LA RIÑONERA, con la documentación personal, los billetes de tren ya pagados, 1000 euros en francos suizos, etc… Buf menos mal no es un TOC, es un POC Putada Obsesiva Compulsiva. Así que media vuelta, llamada apresurada a nuestros amigos para que le suban del Instituto a casa porque no podemos dar media vuelta. Mientras tanto yo espero aparcada a mi hermano que trae la cv desde casa de Monica y es ahí donde hemos quedado para emprender ruta. ¡Pero si viene sin Paula! Por lo visto se ha dado la vuelta a casa porque se le ha olvidado las pinturas para la cara de la bandera de España (para el partido) Eso sí es un TOC ¿ves?.
Estamos todos ya, estamos poniendo coordenadas y Juancho sale del coche y no pone el freno de mano ¡Buf! Casi me rebana el trasero de mi cv …..En fin se ha metido en el coche como Macgiver y ha podido llegar a tiempo evitando el fatal desenlace.

El trayecto transcurre sin problemas, vamos relajando la tensión por minutos y empezamos a disfrutar de las vacaciones.

Después de parar a 50 km de nuestro destino para estirar piernas y repostar gasolina son las 23.00 horas y estamos entrando al camping. Nos hemos desviado unos 8 km de la autovía para pernoctar en un estacionamiento cerrado y vigilado y al fondo del camino empedrado entre la oscuridad diviso a una chica que nos espera acompañada de un pastor alemán. Me da la bienvenida, me presento y me indica donde dejar las cvs. No vamos a desenganchar pero necesitamos luz para que el coche no tire de batería, por lo que nos dirigimos al fondo del camino y estacionamos en línea uno detrás de otro. El recinto está genial, vacío y bien cuidado, lo suficiente para cenar, dormir tranquilos y seguros. Cuando nos devuelve nuestros carnets, que previamente le hemos dado para registrarnos, además del pastor alemán le acompaña su padre en bici. Charlamos un poco con ellos, nos terminan de dar algunos consejos para nuestra pernocta, que nosotros agradecemos amablemente, les pagamos en efectivo y ambas partes nos sentimos más relajados. Es de noche, pero está claro que es un terreno familiar que en el pasado era tierra de cultivo y ahora se ha destinado a estos menesteres. Para nosotros genial, por 17 euros vamos a pasar la noche.

Cada uno ha cenado en su cv, las croquetas de la abuela que nos han sabido a gloria. Hemos abierto todas las ventanas y puesto las mosquiteras. Estamos en mitad del campo empieza a bajar la temperatura, vamos a dormir tranquilos y fresquitos. Hay un silencio oportuno, lo necesitamos. Todos estamos en nuestras cvs y vamos a dormir, ha sido un día duro…..Hasta mañana.


Sábado 30 de Junio de 2012
ZARAGOZA-LE BOULOU
La rueda ALKO

Son las 9.00 de la mañana, no hemos madrugado porque necesitábamos descansar. Hemos dormido muy bien e incluso diría que a partir de las 6 de la madrugada hacía tanto fresco que hemos tenido que arropar a los niños con el edredón. Primero,vamos a desayunar afuera nosotros y así dejaremos a los peques aprovechar un ratito más la cama. Yo soy la primera que estoy preparada, despierto a Boni y me asomo a la cv de Juancho para tocar diana pero no hace falta porque ya está en marcha.

Desayunamos al frescor de la mañana pero el sol ya empieza a avisar que va a pegar hoy de lo lindo. Nuestras tostadas con aceite, otros con mermelada y nuestro café expreso que Boni se ha preocupado de aprovisionar y ahora de preparar. Ahora toca desperezar a los peques. No ponen mucha resistencia y una vez desayunados colaboran con la recogida para continuar ruta. Platos lavados, aguas grises tiradas, mesas y sillas recogidas, patas, mover, todo preparado para efectuar los enganches. ¡Listo! Ahora hay que salir de aquí, haciendo un giro y esquivando un árbol y unos hierros que vaticinan ser divertidos.

Efectivamente, hemos tenido que desenganchar nuestra cv para poder superar la prueba, luego Juancho se ha servido de nuestra experiencia para no cometer el mismo error. Estamos en la barrera de la salida y nos despedimos de la dueña del camping a través de la ventanilla del coche. Ya hace un sol de justicia. Nos desea buen viaje.

Hemos recorrido casi 200 km y vamos a parar en un área de descanso para comer en nuestras cvs y repostar gasolina. ¡Qué calor y humedad! Se nota que estamos en la costa catalana y la ola de calor está golpeando aquí fuerte!. Cada uno en su cv nos servimos una ensaladilla y unas hamburguesas que nos vienen de lujo, previamente preparadas para no tener que calentar en el viaje. Chequeamos todo y avanzamos a la gasolinera para repostar.

Ya estamos en la autopista pero Boni se da cuenta que Juancho no avanza bien, al mismo tiempo suena el whatsap y nos escriben que paremos porque Juancho no ha recogido la rueda de la lanza .Intentamos comunicarnos y decirles que no es prudente y además es complicado estacionar las dos cvs, pero no me responden al Walki, lo llevan apagado. No debe seguir avanzado porque la rueda se le va a fastidiar. Al final Boni tiene que parar y Juancho detrás de él en una isleta . ¡Madre mía ¡ no podemos ni movernos! Los coche y los camiones pasan peinándonos! Juancho ha conseguido subir la rueda y para ello ha tenido que salir por la puerta del copiloto. Continuamos marcha

Después de otros 200Km estamos en Francia y justo a 5 km pasada la frontera nos desviamos a una población llamada Le Boulu donde tenemos pensado pernoctar en el camping que ya habíamos reservado.

La barrera está bajada y las dos cvs tienen que estacionar en línea ocupando una carretera local. Me bajo y me dirijo a la recepción. Allí me presento a una mujer y la digo que tengo dos reservas efectuadas. Nos estaban esperando, me abre la barrera y me dice que indique a las caravanas que avancen hasta la recepción. La señora no tiene ni papa de inglés y de español. Me sorprende más el español porque estamos en la frontera, pero hay que reconocer que los franceses para los idiomas son un crack y ahí lo dejo. Así que, echo mano de mi francés y empezamos a comunicarnos. Nos deja aparcar donde queramos, e incluso, como es para una noche no es necesario que desenganchemos, siempre y cuando podamos apañarnos sin hacerlo. Pagamos sendas facturas y nos dirigimos a efectuar nuestro estacionamiento.

Avanzamos y elegimos las plazas pero vamos a tener que desenganchar porque no hay mucho espacio para maniobrar. Así que, ¡manos a la obra, esto es el mundo del caravaning!

Ya estamos acoplados, hemos dejado las cvs enfrentadas y hemos dejado espacio en medio para instalar nuestras mesas. No ha sido complicado el mover se porta, es todo un invento. Ahora, la rueda jockey de Juancho ha quedado seriamente perjudicada, hay que cambiarla en cuanto nos sea posible, hasta entonces, para aparcarla, nos apañaremos los cuatro (Juancho, Boni , el mover y yo)

Tenemos lo justito, un espacio tranquilo donde pernoctar, un pequeño parque con columpios para los niños y unos servicios al lado muy limpios donde nos vamos a duchar para refrescarnos y relajarnos después del viaje.

¡Joder!¿ He dicho refrescarnos? La ducha es un infierno, no está caliente, está hirviendo. Ya me lo había advertido mi sobrina Paula que fue la primera en probarla pero no me había hecho a la idea. Hemos ido Adri y yo y por un momento he dudado si nos habíamos equivocado y eso no era para humanos. Pobre hijo mío, le he lavado la cabeza y no se como ha aguantado. Ya verás cuando le toque a Alex……Efectivamente, ha entrado en la cv y ha dado su veredicto, me ha dicho que eso por lo menos está a 50ª.

En fín, estamos limpios y relajados que es lo que importa y no tenemos quemaduras de primer grado, por lo que, después de esa fabulosa ducha y la tripa llena nos disponemos a dormir, no sin antes llamar la atención a los tres pequeños porque se dedican a levantar la voz más allá de los decibelios permitidos. Están jugando e intentando hacer amistades pero cuando se han decidido los franceses les han salido rana. Adrián dice que como les eliminamos de la Eurocopa están rabiosos.

Bueno chicos nos vamos a dormir. À Demain!


Domingo 1 de Julio de 2012
LE BOULOU- BRETTE
LA FERME DU VILLARD

Son las 10.00 horas y estamos todos listos para emprender ruta. Hoy nos hemos levantado más pronto que ayer pero hemos descansado estupendamente. El tiempo ha cambiado repentinamente y ha amanecido lluvioso., aunque no se nota en la temperatura. Atravesamos el camping, observando cómo los franceses engalanan sus parcelas como si estuvieran en su propia casa, geranios, mesas de teca y pérgolas se mezclan entre las caravanas y las tiendas de campaña. Nos incorporamos a la pista y emprendemos rumbo a Brette.
Hemos decidido desviarnos de la autopista y dirigirnos a una granja llamada la Ferme du Villard para descansar y así de paso conocer alguna parte más de Francia. Por el camino nos cruzamos incesantemente con caravanas y autos pues es día de salida punta, pero no podía ni imaginar el despliegue de ellas que hay por aquí. Es alucinante, por lo menos hemos contado 100.

Avanzamos tranquilos por la pista y pensamos desviarnos de la autopista. El trayecto es de 360km aproximadamente, así que, vamos a intentar llegar a comer a la granja, aunque sea tarde. Nada nos hace presagiar la aventura que viviremos a partir de este momento para alcanzar nuestro objetivo.

En la desviación nos adentramos en la Provenza. El paisaje es muy bonito, yo diría que hasta bucólico. Estamos rodeados de viñedos en un día cada vez más lluvioso y lo atravesamos por una carretera local. Sabemos que pasaremos por bastantes pueblos y nos da miedo que el gps nos juegue alguna mala pasada y no nos avise de algún estrechamiento inoportuno. De momento las dos cvs avanzan en línea deseosas de llegar a destino. Pobres enanos, venían pensando en aprovechar la piscina del camping pero han bajado las temperaturas y cada vez llueve más.
El Gps no descuenta el tiempo como creíamos. Pronto nos damos cuenta que la carretera se estrecha aún más y que nos adentramos en la montaña. Las vistas son fascinantes pero la carretera, por decir algo, se ha convertido en un camino con desprendimientos de riscos y acantilados a 800 metros de altura. Me consuela, ilusa de mí que las nubes en la montaña han bajado tanto que no me permiten ver bien la profundidad. Nuestras caravanas se portan y mis dos conductores se están ganando con creces un premio de los buenos. Pero la cosa se pone peor y el mapa no me está dando buenas noticias. La carretera se estrecha aún más y veo unas curvas muy pronunciadas que parecen meandros. A Boni no le interesa el mapa y Juancho, que viene detrás, está sufriendo por su embrague, así que me como el marrón de decidir. Bastante tienen los pobres con estar atentos al volante y que no nos despeñemos. A estas alturas me estoy preguntando -¡pero Reyes, tu y tus lugares con encanto¡, ¿no tenías otro camping dónde pasar la noche?! La noche, es verdad, está cayendo la noche , son las cinco de la tarde y nosotros sin comer¡……A 100 metros de nuestras narices vemos el cartel de Brette pero al mismo tiempo otra carretera que indica desvío de camiones. Boni tira del freno de mano y me dice que se planta, que llame al tío y que me indique por dónde tiene que tirar pues no se arriesga. Juancho ídem de lo mismo. En fin, voy a llamar. Al otro lado del teléfono la voz de un niño me responde y me indica que coja la desviación y allí estará esperando.
Llueve a cántaros y salgo del coche para saludar, me invita a pasar a la casa mientras las cvs se quedan custodiadas por los fenómenos conductores.
Estamos en la montaña, en un camino de barro y gravilla y el niño me explica con un mapa que aún debo adentrarme más y bordear el terreno como 600 ó 700 metros. Después de la tensión que llevamos en el cuerpo.
Salgo empapada a explicar la buena nueva. Antes, abro la cv para coger un chubasquero pues me estoy calando y hace frío. Boni se ha cabreado, dice que él no lleva el coche y el caracol hasta arriba, Juancho me come con la mirada pues se ha quedado esperando en cuesta y teme no arrancar. Al final Boni accede a adentrarse unos metros pero cuando le indico que tenemos que girar y subir un poco más, se desespera y tira del freno de mano. HASTA AQUÍ.
Que llueva que llueva, la virgen de la cueva. Madre mía vengo de ver la parcela y mientras me acerco a Boni me estoy riendo a carcajadas. Supongo que cada uno libera la tensión como puede. A mi me ha dado por destornillarme de risa pero a Boni no le está haciendo nada, nadita de gracia. A lo lejos veo llegar a mis sobris con sus short y sus chanclas ad hoc para saber cómo marcha la cosa. Mete a esas niñas en el coche que las va a entrar algo. Ahora ya estamos al completo somos 6 dentro del coche esperando un milagro.
Me dirijo otra vez a hablar con los dueños, esta vez con Juancho que se le ve calentito. Le digo que se relaje como en África, que aquí la gente también va a su ritmo y vamos a solucionar las cosas sobre la marcha. Recula y se lo toma con filosofía. Volvemos a estar bajo la lluvia con el niño, y la solución que nos da al escuchar que no podemos llegar con los coches allí es que Son père nos lleva el coche pas problème.- Pues llama a tu père majo porque si no me quedo aquí mismo a pasar la noche- le dice mi hermanito.
Subo a decírselo a Boni. A estas alturas yo ya estoy calada y cuando no he terminado de decidir con Boni qué será de nosotros pasa Juancho con la cv como Alonso en Montpeló. Es Le Père el que se ha puesto al volante y según mi hermano le ha aparcado la cv en 30 m2 con una mano y en un periquete. Esta claro que este hombre maneja tractores, remolques y lo que le pongas por delante. Se ve que es un hombre de campo, grueso, pachón con una sonrisa en la cara que no sabes si se está riendo de todos nosotros o es que su semblante es así.
Después de que nuestro 4*4 se porte y Boni estacione nuestra cv, el hombre que no ha parado de sonreír y dirigir la maniobra, a pesar de nuestras miradas afiladas y nuestros dientes de sable, charla con nosotros unos minutos bajo la lluvia y nos invita a tomar un aperitivo en la casa. Se lo agradecemos y lo emplazamos para más tarde pues vamos a comer porque no hemos pegado bocado todavía.
Juancho y yo ya estamos más relajados, Boni aún sigue cargadito viendo pegas dónde no las hay. Un paisaje espectacular ante nosotros y unas parcelas con sus enganches de luz y agua. Bueno, agua exactamente no vamos a necesitar ya estamos calados.
Hemos comido e intentamos sintonizar el canal para el partido de la final de España contra Italia, pero no podemos coger ningún. Nos lo tomamos con humor, los niños ya están mentalizados a que seguramente no lo podremos ver. Ahora ya más relajados, nos vamos todos hacia la casa de la granja, pues nos ha invitado nuestro amigo Herve.
Efectivamente nos está esperando. Es una familia extensa, Nathalie, la madre que no la veremos el pelo hasta el día siguiente con sus 6 hijos, el que nos recibió. Renee, que no tendrá más de 11 años, otros 4 adolescentes y la pequeña Anna de 4 años y medio que apunta maneras. Se ha presentado despeinada, en pijama y descalza, pisando el suelo que está lleno de charcos. Adrián., Alejandro, Lucía y Paula no la dejan de observar. Se ríen pero se extrañan porque nadie la regaña ni la dice nada. Anna se enfada, porque mientras su padre nos deleita con un sirope de lavanda de elaboración propia, los niños están jugando con un conejo que hay en una conejera y eso a la pequeña no le gusta porque es suyo y quiere que le dejen en paz.
El sirope tiene un dulzor muy similar a la manzanilla con anís, brindamos seguimos conversando con Herve que nos dice, entre otras cosas, que la granja se mantiene desde hace 6 generaciones. Todos colaboran en ella, eso es evidente. No es una atracción turística al servicio del cliente, es una granja en toda regla, donde cada uno de los miembros es parte importante de la cadena de engranaje.
Después de pasar a una pequeño despacho donde nos presentan todos los productos que elaboran, compramos quesos, por supuesto, jabón, mermelada, un vino blanco achampanado que está de muerte, fresquillas y nueces. Ahora invita a los peques a ver las cabras y las ovejas. Cruzamos el campo y nos dirigimos a una nave, sigue lloviendo y vamos en chanclas pero no importa todos estamos ensimismados y ninguno de los niños se pierde detalle a pesar de la plaga de moscas y el olor a bovino que planea por nuestras cabezas. En ese momento Boni se arrepiente de su negatividad puntual y disfruta, le recuerda su infancia. Ha merecido la pena llegar hasta aquí para ver la cara de los niños.
Acaban de nacer 2 ovejas, todavía tienen colgando el cordón y están impregnadas en placenta. Herve le entrega un biberón a Lucía para que se lo de a una cabrita, están flipando. Estamos rodeados de ovejas y cabras y ninguno de los niños protesta por las moscas y el hedor.
Después de un buen rato charlando y disfrutando en la granja, nos despedimos de Herve que ha invitado a los niños a ordeñar mañana temprano a las ovejas y las cabras. Todos asienten rápidamente. El queso se elabora a las 6 de la mañana, así que por esta vez tendrá que esperar. Nosotros nos quedamos debajo de una pérgola que hay instalada en el porche de la casa, pues desde allí nos ha dicho Herve que podemos tener señal para ver el partido. El agua chorrea por todos los lados y solo hay dos sillas disponibles para usar pues el chaparrón ha empapado el resto. Tenemos una moral que no es normal, aún así no conseguimos pillar el partido. Mientras tanto Anna se ha quedado afuera con nosotros y está jugando con Lucía. Es maravilloso observar como el idioma de los niños es universal y no hay barreras lingüísticas que valgan para hacerse entender.
Vengo calada hasta el ombligo. En vista de que no conseguimos conectar con el partido he decidido acercarme a la cv a por otro ordenador, por si el antivirus del de Juancho lo estuviera impidiendo. He atravesado todo camino y no hay una parte en mi cuerpo que no tenga agua. España va ganando y seguimos sin verlo. Ha sido un día duro y me lo pienso mejor. Me despido de todos y me voy a la cv, llevo conmigo a Alex, Lucía y Adrián. Allí dejamos a los otros tres que al final conseguirán ver la segunda parte a través de una página Argentina. Nos despedimos de Anna que todavía sigue con nosotros. Sus hermanos entran y salen todo el rato. Unas veces a por fruta, otras a por patatas y hasta en otra ocasión uno de los gemelos acelgas que más tarde compartirá cocinado con Boni Juancho y Paula.

Nosotros ya estamos calentitos y en pijama en nuestra cv. Mientras los peques pintan y yo leo un poco, charlamos de sus impresiones. Lucia y Alex quieren vivir en una granja como esa y los tres coinciden en afirmar que este camping es el mejor y más divertido.

Ya son las 11 de la noche y los tres hinchas entran por la cv, empapados hasta los huesos pero satisfechos. España campeona de la Eurocopa, una vez más celebrándolo en Francia, como el mundial de hace dos años y nada menos que 4 a 0. Estupendo, cenamos ese queso que los franceses saben elaborar como nadie y los mayores brindamos con un rioja. Nos vamos a la cama que mañana hay que ordeñar las cabras y ha sido un día intenso. Al otro lado de los Pirineos nuestros compatriotas estarán celebrándolo con bocinas y fuegos, nosotros en el país que eliminamos en cuartos nos dormimos en el silencio más absoluto. Dulces sueños

Lunes 2 de Julio de 2012
BRETTE-GRUYÈRES
UN TRAYECTO DE INFARTO

He despertado pronto, deben ser las 7.00. Escucho llover y por un momento se me pasa por la cabeza que hoy tenemos que salir con nuestras cvs de esa montaña. Pero ya lo pensaré más tarde como Scarlett O´Hara. De momento, hemos quedado con esta familia para ordeñar y hay que prepararse.

Estamos en la nave y aunque la temperatura no es mala, cada vez llueve más. Entendemos por qué es una tierra tan fértil y verde. La familia tiene pinta de haber empezado su jornada hace ya un par de horas. Conocemos a Nathalie, la madre, pero entre tanta actividad no da tiempo a cruzar palabra. Decidamente esta familia te traslada a la edad media. La mujer tiene una apariencia tosca. Lleva el pelo totalmente despeinado agarrado con una trenza, ataviada de faena y llena de energía. Le ayuda su hijo Renee con una responsabilidad envidiable. El otro adolescente, Etienne, dirige a las ovejas que se colocan obedientemente en sus lugares para ser ordeñadas. Alrededor, merodea Domino, un Collie de la familia muy docil al que Nathalie le derrama en el suelo de la nave el calostro sobrante para que lo beba. Todo transcurre con una velocidad tremenda, en la que todos nos sentimos un poco intrusos y analfabetos. Mientras que los niños dan el biberón a las cabritas y las ovejas, intento hablar parcamente primero con Renee que me confirma que está de vacaciones y estudia en un colegio interno, en Die a 45 minutos de ahí. Luego le reafirmo a Nathalie que el trabajo es duro y no me lo niega pero dice que está bien, parece que le gusta y disfruta con su vida. Una vez embriagados del intenso olor que desprenden los animales, dejamos a la familia proseguir con su faena, despidiéndonos de ellos y agradeciéndoles la dedicación prestada. Ahora toca salir de aquí, preparados y todos uniformados con nuestras camisetas de la selección española.

Herve nos ha asegurado que la carretera hasta empalmar con la D95 no es complicada, no obstante, tenemos que recorrer un primer tramo complicado de unos 2 km hasta alcanzar Saint Nazaire.
Acabamos de cruzarlo sin ninguna complicación y con la suerte de no habernos cruzado con ningún otro vehículo de frente.! Bien¡ hemos superado el obstáculo, yo voy haciendo de copiloto a Boni, adelantándome a los obstáculos del otro carril que adivino cuando la carretera se pliega tanto y que soy capaz de divisar a 1 km. Ahora, la carretera se bifurca y el Gps nos indica que tenemos que tomar la de la derecha, pero es una elección demasiado dudosa. Llueve muchísimo y hay muchas nubes en la montaña, tantas que no dejan observar bien el camino. Las dos cvs están paradas en mitad de la carretera, obstaculizando el paso y sin saber cuál es la decisión acertada. Intento explicar a Boni que lo que indica el navegador me parece un tanto arriesgada una vez contrastado con el mapa. En ese momento, me viene a la cabeza mi amigo José que nos tiene dicho que los mapas hay que saber leerlos. Los nervios y la falta de habilidad no me dejan ver las cotas, pero esa opción es muy arriesgada, estoy segura. Por otro lado, nos da miedo no hacer caso a la maquinita, porque la otra opción no es tampoco muy segura. De repente, escuchamos unos toques en el cristal. Es un francés muy bien parecido que nos pide que desplacemos a un lado la cv para que pueda pasar él. Por un momento pienso que estamos salvados y le pregunto que cuál es la mejor opción para las cvs. Adivinó los aires de grandeza del marqués, pues muy irónicamente me ha respondido que no tiene ni idea porque también es turista e insiste y repite que aparte la cv a un lado para que pueda pasar. Ante la desafiante reacción tenemos que tomar una rápida decisión y optamos por hacer caso al GPS.
Estamos haciendo un giro de 180º y a través del cristal cruzo la mirada con Juancho, su cara lo dice todo. Estamos subiendo a una velocidad lo suficientemente ligera para tirar de la cv y que no se quede atrás. En la cola Juancho siguiendo nuestros pasos. Hemos girado un par de curvas más por una carretera que podíamos definir como camino asfaltado. Miro a través del cristal, otra vez, y divisó el precipicio. No hago más que mirar a Boni que me dice que no me preocupe, que el coche responde pero atrás va mi hermano con mis sobrinas y no puedo dejar de hacerlo. Cuando estamos intentando adaptarnos a la situación la carretera nos amenaza con otra disyuntiva más. Hay dos señales una, que nos obliga a subir todavía más y otra que según el mapa nos devuelve al lugar dónde empezamos. Retomar el camino recorrido sabemos que es una locura, hay que seguir. Pero la opción es temeraria, hay nubes, lluvía y seguiríamos subiendo. Boni no puede más, quiere que yo de el pistoletazo de salida pero necesito que alguien me ayude ¿y si seguimos ascendiendo por una carretera que desemboca en camino, y si el estrechamiento es aún peor? Boni me dice hay que continuar. Me bajo del coche porque detrás de nosotros veo parado un vehículo que está esperando. Me acerco entre la lluvia a ellos esperando por arte de magia oír la respuesta adecuada y tranquilizadora. Pero el conductor, turista también, solo me indica que debemos seguir subiendo, tampoco me aclara si es un lugar apto para cvs. Me meto en el coche y medio temblando, no se si por el frío o por la situación le digo a Boni que para arriba. De repente, me doy cuenta que he salido de la nada en medio de una montaña con la cara seguramente desencajada entre dos cvs y con la camiseta de España ¡Qué Friki¡ Imagino por qué la gente no ha puesto mucho empeño en ayudarnos.
Seguimos subiendo con mucha dificultad a 1500 metros y después de una curva de vértigo en la que Boni tiene que meter el 4*4 y yo no se cómo diablos se las va a apañar Juancho, parece que hemos coronado y empezamos a descender. Sigue lloviendo y nos damos cuenta cómo en mitad del asfalto hay pedruscos que se desprenden de la montaña. Esto es un mal sueño, no puede ser, estamos viendo que para pasar hay una roca de la montaña que ocupa un tramo de la carretera. Hay que esquivarla y no vamos a poder, Boni me dice que sí y pasa casi rozando la cv. Volvemos a tomar otra curva y yo no veo a mi hermano, tampoco Boni, al que adivino su cara de preocupación. No contestan al Walki, siguen sin contestar.¿Qué tal? Insisto. Silencio absoluto…….. Estoy escuchando a Lucía através del Walki.- Mi padre está maniobrando porque si pasa roza la cv.- Mientra tanto mis hijos siguen jugando a la psp, solo Alex demuestra algún gesto de preocupación preguntando que cuándo dejamos esa carretera. Siguen sin aparecer y Boni me deja con el freno de mano y el coche en marcha e intenta acercarse para ver lo que está pasando. De repente, del walki irrumpe una vocecita tranquilizadora que dice –Mi padre es un crack- ¿Qué dices Lucía? –que mi padre es un Crack- Buf¡ menos mal1 Continuamos ruta y parece que la carretera se tranquiliza y estamos llegando a la meta.
Efectivamente, tras unos minutos más de angustia y dejando atrás dos horas de trayecto infernal hemos llegado a la D95, pero el navegador vuelve a hacer de las suyas e intenta desviarnos otra vez de la carretera. Se ha propuesto acabar con nosotros y no lo vamos a permitir. Vamos derechos a otra concentración de montañas Así que decidimos pararnos en la primera explanada viable del arcén y tomamos los mandos nosotros junto con el mapa de carreteras.

Por fín estamos en la autovía que hemos alcanzado a través de la D95. Enseguida avanzamos km pero llevamos en el coche por lo menos 6 horas. Solo hemos parado para comer y relajar un poco las piernas, pero todavía hay que llegar a
Gruyeres y asentar nuestro campamento. Estamos en la frontera y acabamos de comprar las viñetas que nos permitirán utilizar todas las autopistas de Suiza por el módico precio de 70 euros.
Llueve muchísimo y las nubes están tan bajas que no nos dejan ver las montañas. Bordeamos Ginebra y luego Laussanne y por la ventanilla derecha divisamos el lago Leman. Impresionante, parece el mar. Boni y yo ya lo estuvimos recorriendo hace doce años pero ahora estamos otra vez delante con los peques. Adrián y Alejandro apagan sus psps a duras penas ante mi insistencia pero más tarde se dan cuenta de que es una postal espectacular que no se deben perder. Lástima que la lluvia no nos deje disfrutar más de él.

Estamos en Gruyeres y tenemos las coordenadas del camping. Creemos que no va a ser difícil encontrarlo. Después de 8 horas de viaje estamos muy cansados y no será posible aguantar más sorpresas…..

Supongo que es otra bromita de nuestro navegador. Nos ha mandado desviarnos y ahora nos indica que nos demos la vuelta. Estamos en medio de una pradera, entre las montañas y tenemos que maniobrar en un pueblo al que no nos atrevemos ni a entrar. Eureka¡ Boni en un giro de 360º ha conseguido hacer el cambio de sentido y luego detrás con un mismo giro lo ha logrado Juancho. Estos chicos están hechos unos hachas. Después de lo pasado deben creer que están en los coches de choque. El gps nos indica que giremos y tras unos minutos de tensión, pues ya llevamos tela en nuestro cuerpo, decidimos hacerle caso. Continuamos por una pequeña carretera, rodeados de praderas intensamente verdes y cuál es nuestra sorpresa cuando nuestro querido Tom Tom que más bien es TonTo nos indica que hemos llegado a nuestro destino. Aquí no hay camping. Aunque a lo lejos creemos ver algo no nos atrevemos a continuar. Así que, llamadita de teléfono para recibir instrucciones.

La señora del camping me ha dejado como estaba, bueno miento ahora tengo una cara de tonta que para qué. Eso sí, en el caso que consigamos encontrarlo la barrera está abierta y podemos disponer de las parcelas que queramos, ya la pagaremos. Cojonudo, no sabemos qué hacer. Para un solo día esto es demasiado, Le digo a Boni que pare al primero que venga de frente, pues tiene más a mano la ventanilla. Juancho ya lo ha intentado unos minutos antes pero no ha tenido suerte, Nadie conoce el camping. Le pregunto al señor que para Boni a través de la ventanilla por el nombre del camping y sorprendentemente lo conoce. Trata de decirnos que está al otro lado de la carretera pero el acceso es complicado desde donde nos encontramos. Se brinda a llevarnos y me dice que le sigamos, va a dar la vuelta y todo. Estamos gratamente agradecidos, no nos lo podemos creer. Avisamos a Juancho por el walki y emprendemos una carrera de coches pues lleva una velocidad de vértigo.
Después de recorrer unos 3 km detrás de este buen hombre nos planta delante de la carretera para girar a la derecha. El tiene un coche pero nosotros 2 cvs y además hay que atravesar la vía del tren sin paso a nivel. Esto empieza a preocuparme,

Por fín, ante la puerta del camping. Salgo del coche para despedirme de ese buen hombre. No se cuántas veces le he dicho gracias, pero me han dado ganas de darle un abrazo de verdad. Hay que ver qué pequeño favor se entrega en algunas ocasiones y
qué gran favor es para el que lo recibe. Espero que a lo largo de mi vida sea de la misma utilidad en la entrega de alguno de ellos.

Hemos acoplado nuestras cvs sin ninguna complicación bajo una lluvia incesante. Entre praderas y montañas y saludando a un par de vecinos que se asoman por sus avances vamos a cenar y a irnos a descansar que nos lo merecemos todos. Algunos por valientes, otros por pacientes y una servidora por incansable….Hasta mañana.

Martes 3 de Julio de 2012
GRUYÈRES
QUESO Y CHOCOLATE

Hemos descansado muy bien. Tenemos pensado ir a Gruyères y visitar la fábrica de quesos, luego nos acercaremos a la localidad de Broc a la fábrica del chocolate.
Hoy el tiempo nos ha dado tregua. Las nubes se están disipando y se puede ver el contorno de algunas montañas. Hace un día caluroso, con bastante humedad. Los mayores ultimamos la excursión mientras los pequeños se divierten en la pradera del camping y en los columpios. Los niños se lo están pasando en grande, alguna pelea de vez en cuando, pero nada que no se pueda resolver con buena voluntad. La verdad es que solo se nos oye a nosotros. De vez en cuando el sonido del tren nos recuerda que la vía pasa cerca de nuestras cvs.
Hemos llegado a Broc. Vamos a visitar la fábrica de Nestle. Cuando hemos comprado las entradas un miembro del personal que nos ha atendido nos felicita por la Eurocopa. Mientras esperamos a que el panel digital nos marque la entrada, nos distraemos viendo en los expositores la variedad de chocolates que la fábrica pone a nuestra disposición. Un empleado nos indica de la duración aproximada de la visita y nos avisa de que tengamos cuidado con el mecanismo de las puertas. Entramos en un habitáculo que ambienta muy bien el escenario del nuevo mundo. Se puede oler a chocolate por todas partes, la vegetación y el sonido están también muy bien ambientados. Ahora empiezo a entender la advertencia del empleado. La historia del descubrimiento del chocolate por los europeos y el posterior traslado al viejo continente se va recreando en distintos habitáculos. Debemos ir pasando a través de unas puertas que se abren y se cierran a nuestro alrededor y que nos trasladan a cada uno de los pasajes narrados. Los niños están muy atentos a las explicaciones de una voz en inglés. Ya nos sabemos la historia del cacao, hasta hemos olido las semillas. También nos han presentado a los personajes suizos como Nestle y Cailler, entre otros, que lo produjeron y elevaron al estatus que regenta ahora. Ahora presiento que viene lo mejor. Efectivamente, estamos delante de una empaquetadora de bombones y al final hay una bandeja para coger alguno. Alex, está desolado, todos echan mano de un puñado menos él, pues están rellenos de almendras y su alergia no se lo permite. Boni y yo le prometeos que a la salida le compraremos una tableta par él solo…
Pero ¡Si no va a hacer falta! En la sala continua hay un mostrador ovalado con bandejas de diferente variedad de chocolates. Tenemos que pasar por lo menos por 20 modalidades distintas y podemos probarlos todos. Es el paraíso de los niños y no tan niños. Preguntamos a una azafata que está en el medio del mostrador cuales son los que Alex puede comer y nos indica, por lo menos la mitad de ellos. Los niños están comiendo de dos en dos, es un exceso, los mayores también estamos disfrutando, ya no te digo Boni que no le oído hablar en todo el tiempo y va detrás de mí. Blanco, negro, con almendras, con naranja, praliné……..Hemos probado, por lo menos una media de 20 bombones y chocolatinas cada uno, estamos empachados. Los niños han parado de comer por sí solos, hasta ellos mismos dicen que están saciados!,!Supongo que los 1600 km que han tenido que sufrir para llegar hasta aquí les ha merecido la pena. Ha sido una experiencia genial.
Hemos terminado de comprar algunas chocolatinas y muertos de sed, os podéis imaginar por qué, nos dirigimos a Gruyères a la fábrica del queso.
En la Maison du formagerie, como se llama a la fábrica, al comprar las entradas nos han regalado un paquete de queso a cada uno en distintas etapas de curación. Después, una vaca, llamada Cerise, a través de unos audífonos nos ha explicado cómo se elaboran sus quesos, mientras lo observábamos en directo. La visita ha sido también muy interesante pero, claro, para los niños no hay color.
Nos hemos adentrado en la ciudad medieval de Gruyères por la puerta principal. Paseamos por su calle principal, empedrada y engalanada por doquier de geranios. Vamos paseando hasta llegar al castillo. Por el camino un Luthiers está trabajando la madera y fabrica guitarras de 5 cuerdas. Le preguntamos el porqué y nos responde que antiguamente el número de cuerdas era ése. Nos invita a probar alguna. Boni se entrecruza una guitarra eléctrica y empieza a tocar. El sonido es muy grave, es diferente. Le damos las gracias y nos marchamos,. Juancho se recrea con sus fotografías y los niños inventan juegos y hacen de sus picias mientras paseamos. Al pie de los Alpes friburgueses, esta ciudad medieval cautiva por su pintoresca arquitectura. Hemos llegado al castillo pero no lo vamos a visitar por dentro, sin embargo bordeamos la fortaleza que nos deleita con unas relajantes vistas y curiosamente en el camino vamos inhalando todos los olores florales de las que las vacas de aquí se nutren para elaborar sus quesos, tal y como nos adelantó la vaca Cerise. Hemos acabado de pasear por la ciudad y dejamos a los niños que se relajen en un parque a los pies del castillo. Nosotros, mientras tanto, observamos como una mujer se dedica a trabajar su huerta minuciosamente. Aquí en cualquier pradera hay una flor o un vegetal comestible.

Intentamos subir a Le Molèson, una de las comas que domina la ciudad de Gruyères y de la que se obtiene una vista panorámica de los Alpes, el lago de Ginebra y la región, pero la empleada del punto de información turística nos lo desaconseja. Las nubes están muy bajas y no va a merecer la pena. Nos quedamos con las ganas y decidimos que puede ser una buena oportunidad regresar al camping. Son las 17.00 horas y es el momento ideal para terminar la tarde con una buena ducha y cenando caliente. Después de tantas grasas saturadas nuestro organismo, nos lo agradecerá.
Pues sí, una ducha y unas lentejas nos han sentado de lujo. Son las 20.00 horas y antes de irnos a dormir vamos a aprovechar a preparar la etapa de mañana y los peques en la cv de Juancho a jugar un poco. Les gusta tener su espacio, dibujan, inventan historias y sobre todo, se ríen tanto, que de vez en cuando debemos frenarles. Otra vez el camping está en silencio, Solo se escuchan los cencerros de algunas vacas. Nos vamos a dormir.

Miércoles 4 de Julio de 2012
GRUYÈRES- BEATENBERG
EL TRACTOR DE HANDRESTZ
Hoy emprendemos rumbo hacia la región de Oberland Bernés. Vamos a estar allí 8 días y pensamos explotar la zona todo lo que podamos. El trayecto no va a ser complicado, creo que por una vez nos lo merecemos. De Gruyères a Interlaken tenemos todo autopista. Solo nos tenemos que preocupar en el desvío hacia Beatenberg, pues tenemos que tomar la desviación por Grunten- Unterseen y no por Sigwril. La dueña del camping ya me lo avisó por mail que de lo contrario, desembocaríamos en una carretera intransitable.
Estamos llegando a Thun y vamos a bordear todo el lago para llegar a Interlaken y atravesarlo. La vista es impresionante. El agua de color turquesa y las montañas se rinden a sus pies. Hay muchas nubes y no podemos ver los picos, es una pena, pero tenemos por delante muchos días para disfrutar de ellos. Además Beatenberg está a 1500 metros y desde nuestro camping tenemos una ventana abierta al Jungfrau, Eiger y Möch. Bordeamos el lago por una carretera a ras de la orilla. Los niños dicen que parece que vamos en barco. Ahora hay que salvar la desviación, lo hemos hecho bien. Ya estamos enfilados a Beatenberg. Hay que ascender a 1500 metros. La carretera es muy cómoda y el paisaje no puede ser más espectacular. Claro, estamos en Suiza. Además, después del training del otro día esta carretera nos parece un paseo. Al final tenemos que estar agradecidos a la experiencia del otro día porque podemos ir disfrutando en el ascenso.
Nos hemos desviado por un camino una vez pasado el pueblo, que indica el nombre de nuestro camping. Nos damos cuenta que se encuentra en una ladera de la montaña dispuesto en terrazas, espectacular.. A lo lejos, un señor que está trabajando la tierra nos hace señales indicándonos que continuemos rectos por el camino. Pronto adivino que debe ser el dueño del camping. Es un camping natural, como ellos lo llaman, en la mitad de la ladera de la montaña, en donde se saltean algunas casas de madera de labranza. Tenemos que hacer un giro de 180º para doblar en la carretera y el señor se ha acercado unos 100 metros para darnos las indicaciones oportunas. Salgo del coche y me presento. Me dice que las cvs tienen que bajar todavía un poco más por la ladera pero que si es necesario engancha el tractor y nos las coloca él. Por supuesto, que sí.
Mientras que prepara el enganche para hacer las maniobras, su mujer, ha llegado. Me presento igualmente y me percato de que la debemos haber transmitido mucho nerviosismo porque insiste, con una voz muy dulce y un tono suave en que nos relajemos, que vayamos despacio. En esos momentos imagino lo acelerados que vivimos en muchas partes del mundo y al mismo tiempo también me siento un poco ridícula y avergonzada. Estoy de vacaciones y sin quererlo, ni siquiera desearlo, hemos transmitido un mensaje absoluto a esta gente: Venimos alterados. Intento relajarme pero aún así yo mismo me doy cuenta de que ya estoy preguntando por el tiempo de mañana para hacer planes y no nos hemos ni instalado. Catherine, la dueña, ya nos ha definido como muy temperamentales. Su marido, Handrestz, bautizado así por nosotros porque se parece a un amigo del pueblo de mis padres sigue enganchando con el tractor nuestras cvs y las mueve y levanta con una maña que parece que está cosechando la tierra.

Después de instalarnos y comer hemos quedado con Catherine para que nos de alguna información de los lugares de la zona. Se avecina tormenta para esta tarde y lo que es peor lluvia para los próximos días, así que es mejor que nos lo tomemos con filosofía. Los planes dentro de un orden se irán haciendo sobre la marcha.

Hemos comido en el porche delante de un escenario espectacular. Las nubes no nos dejan ver las montañas más altas pero estamos en un paraje idílico. Los niños se divierten explorando el lugar. Han descubierto unos conejitos que pertenecen a los dueños e intentan jugar con ellos y darlos de comer. También se divierten con un perro y su pelota que cuando se la tiran la devuelve. Estamos rodeados de praderas y pueden disfrutar revolcándose de lo lindo. Se sienten libres, muy libres.

Terminamos de tomarnos nuestro café vienes en el porche y vemos como la tormenta se avecina. Las predicciones de Handrestz y Catherine no han fallado. El sol del que anteriormente tuvimos que huir desaparece del panorama y las nubes cubren totalmente el valle. Nos atrincheramos en las cvs e intentamos entretenernos. Durante un par de horas no para de llover, hoy la tarde ya está echada, no vamos a poder hacer nada más.

Después del chaparrón hemos descubierto el parque para los niños del que nos habló Catherine. Está debajo de la ladera, en un bosque. Los columpios son de madera y hay hasta una tirolina casera que va de árbol a árbol. Lucía y Alex que vienen con nosotros tres, pues lo dos mayores se han quedado en la cv, se ponen muy contentos y corren a avisar a Paula y a Adrián. Ha sido toda una sorpresa y la van a aprovechar. Después nos recogemos para cenar e intentar hacer planes para mañana, a pesar del pronóstico del tiempo.
Catherine tenía razón, ya nos sentimos mucho mejor. Puede que haya sido la tensión de estos días. Ahora, ya estamos en la región de Jungfrau, rodeados de montañas y valles, toda un placer para los sentidos y una terapia para el ser humano.

Jueves 5 de Julio de 2012
ISELTWALD- GIESSBACH
BRIENZERSEE

Son las 7.30 de la mañana y un rayo de luz intenta entrar por debajo del oscurecedor de la ventana de mi cama. Me incorporo y levanto un poco. No me lo puedo creer, el sol no me deja abrir los ojos. El cielo está totalmente despejado. Esta sorpresa me hace dar un salto de la cama y abro la puerta de la cv. Ha amanecido totalmente despejado. En frente de mi las tres cimas nevadas se delimitan perfectamente con el azul del cielo. Boni se despierta detrás de mí y salgo a la cv de Juancho para decir la noticia, el tiempo nos da un respiro. Cuando estoy en su puerta veo que viene ya vestido de los baños.Nuestras miradas se cruzan y lo dicen todo. Hoy hay que aprovechar por la mañana. No es el día elegido para subir porque anuncian tormentas, a partir de las dos. Pero podremos embarcar para navegar por el lago Briez y desde Iseltwald hacer alguna andada por el sendero. De repente, suena una bocina. Es el panadero que sube en coche al camping para que compremos.
Juancho ha comprado dos panes grandes y una baguette o algo así parecido, para hacer los bocatas y las tostadas de mañana. No es barato, ha pagado 10 francos suizos por todo, pero está rico. Después preparamos bocatas de cinta de lomo a discreción, nos aprovisionamos de agua y chubasqueros y salimos a nuestra excursión.

Estamos esperando el barco en Interlaken Ost. Vamos a navegar un poco por el lago, para que los niños disfruten y luego nos apearemos en Iseltwald. El agua es extremadamente turquesa.

Después de 15 minutos sobre el lago ya estamos en Iseltwald. Empezamos la ruta hasta las cataratas de Giessbach por un sendero de bosque. La duración es de 1 hora y media pero la temperatura es ideal e incluso disfrutamos de sol. Atravesamos praderas, bosque de una vegetación abundante con árboles, que se elevan tanto, que en algunos tramos no nos dejan ver el cielo. Estamos solos en el sendero pero no tiene pérdida. Los niños se están portando estupendamente. De vez en cuando se quejan en algún ascenso pero en cuanto el terreno llanea siguen con sus juegos. Paula y Adrián se han inventado un idioma y van hablando e imaginando durante todo el trayecto. No paran de reir y de paso no se enteran del camino recorrido. Lucía no empezó muy animada pero ahora va a remolque mío me va contando todas sus experiencias del colegio. Está tan ensimismada en sus historias que no se ha dado cuenta que ha recorrido ya la mitad del trayecto. Alex se ha reenganchado a su padre y van cantando por el camino “tengo una vaca lechera. Hemos bordeado una casita de madera de donde salen dos niños asiáticos. Les saludamos y les dejamos seguir jugando con sus bicicletas.

El bosque es una amalgama de distintos aromas. Yo he podido identificar hasta el de la miel. La cascada ya no debe estar lejos porque se empiezan a oir el ruido del agua. Voilà, estamos frente a ella. Toneladas de agua van cayendo delante de nuestros ojos. Sacamos las cámaras y empezamos a fotografiar. Curiosamente nuestro hijo Adrián nos ha tirado una foto delante de la cascada de Giessbacha Boni y a mí. Es la misma que un japonés nos tiró hace doce años, en el mismo sitio, en la misma posición en nuestra luna de miel. Le pido la cámara para comprobar cómo ha quedado. ¡Qué alegría, después de 12 años, estamos mucho mejor!.
Hemos decidido por unanimidad comer nuestros bocatas aquí en la cascada justo en un banco que hay para nosotros.
Después de una marcha de una hora y media a paso ligero todos tenemos un hambre feroz. El bocata nos ha sabido a gloria. Ese pan está exquisito junto con nuestro lomo y algo de queso.
Llegamos hasta el embarcadero de Giessbach y tenemos el tiempo justo para regresar a Iseltwald para volver a coger el barco. El regreso está estimado en otra hora y media pero nosotros ya tenemos un retraso de 10 minutos, así que nos toca poner la quinta y pisar el acelerador. Los niños se nos han enfadado un poco cuando se han enterado que tenemos que hacer el camino de vuelta otra vez andando. Esta vez regresamos por la orilla del lago, el trayecto es más llano y no tiene tantos cambios de rasante.

Lucía va marcando el ritmo de momento poniéndose a la cabeza. Ahora la ha dado por decir que ella es muy deportista. Alex, empieza de nuevo a cantar con Boni la vaca lechera. Adrián por un momento se ha quedado el último y dice que a él le gusta ir a su ritmo. Pronto le explicamos que no puede elegir porque si no perdemos el barco y nos tendrá que tocar esperar otras dos horas. Eso y un helado parece que le convence y acelera el paso. Paula, me sorprende, no dice nada y sigue a un ritmo bueno. De vez en cuando hablamos y luego regresa a su mundo. Se avecina tormenta y todavía nos queda la mitad del recorrido. Cuando los peques preguntan les engañamos diciendo que queda poco. La verdad es que el sendero no tiene desperdicio, el camino es diferente al anterior, pero es también muy bonito. Empieza a llover y tenemos que hacer un alto para ponernos los chubasqueros.

Llevamos un ritmo vertiginoso. Estoy asombrada de cómo los niños aguantan. Están acostumbrados a andar mucho pero la marcha de hoy además de larga está siendo muy rápida en este último tramo.

Quedan 10 minutos y por fín, entramos por Iseltwald. Lucía, que empezó muy bien, se ha quedado un poco rezagada atrás con su padre. Dice que la duelen las piernas. Nosotros que estamos más adelantados, aunque vamos muy justos, todavía tenemos tiempo de comprar helados. Estamos pagando y llegan Juancho y Lucía pero no quieren nada. Ya estamos en el embarcadero. ¡Justito!. No hemos hecho más que llegar y el barco hace su entrada. Prueba superada.

Después de todo el día andando por el lago, ya estamos en Beatenberg. Hemos hecho una paradita para comprar algo de fruta en el pueblo. Naranjas de Valencia, albaricoques, fresquillas, peras y algún yogurt, no muchos, total, 24 francos suizos, algo así como 20 euros.
Sentados en el porche de la cv nos comemos nuestra fruta mientras los peques se divierten con los conejos. Han venido durmiendo en el coche desde Interlaken pero en cuanto han llegado….los conejos les entusiasman. Han puesto a cada uno un nombre, Manchitas, Rechoncho, etc…
Son las 8 de la tarde, el día ha sido fabuloso, es más, estamos sentados frente a los 3 picos y la luz es estupenda. No hay nubes y se pueden ver todas las montañas majestuosas ante nosotros. No somos los únicos, hay alguna persona más en el camping que lo está disfrutando igual. No nos cansamos de estar ahí, pero tenemos que retirar el campamento porque toca cenar e irse a la cama pronto. Mañana más.

Viernes 6 de Julio de 2012
BERNA
PASADA POR AGUA

Hoy ha amanecido un día muy lluvioso. Como no podemos hacer ninguna excursión de montaña vamos a aprovechar para visitar la ciudad de Berna, aunque nosotros ya la visitamos en nuestro anterior viaje, para los niños será algo diferente y divertido dar de comer a los osos y además, según el pronóstico del tiempo tenemos más probabilidades de librarnos del chaparrón.

Son las 12.30 y estamos aparcando en el centro histórico de la ciudad. Hemos entrado por uno de los puentes, el de y dejamos los coches aparcados en el parking del casino. Está nublado pero no llueve y la temperatura es muy agradable.
En apenas 300 metros andando llegamos a la torre del reloj. Esperamos a que toque, pero solo dará una campanada pues es la una. La avenida está franqueada por dos soportales de arcadas. Por cada 100 metros aproximadamente encontramos una fuente que lleva un nombre. Antes de comer vamos a visitar la catedral, a pocos metros de la avenida, desviándonos a la derecha.

La catedral de Berna de estilo gótico tiene una cubierta perfectamente identificable con su bóveda soportada con pechinas que permiten que los muros sean más ligeros y con vidrieras.

Vamos a subir a la torre del campanario y para ello tenemos que dejar las mochilas en el mostrador donde compramos los tickets. Emprendemos la subida escalón por escalón por una espiral lo suficientemente estrecha como para justificar la entrega de mochilas. Después de una buena sesión de steps hemos llegado al final. Desde allí se puede tener una buena vista aérea de toda la ciudad. Lo más bonito los tejado de las casas y el río Aar bordeándola. Lástima que las nubes no nos dejen ver los Alpes. La verdad que la luz de hoy desmerece un poco esta ciudad. Por el tramo que nos baja del campanario podemos ver campanas de hasta 10.000 kgs. El peso total de todas ellas asciende a 30.000 kgs.

Ya hemos puesto los pies en la tierra, y recuperamos nuestras mochilas .Con tanta subida tenemos un hambre voraz, así que, continuamos hasta el final de la avenida que desemboca en la fosa donde 3 osos descansan pacientemente en un área de 6 hectáreas y esperan a que un puñado de turistas les fotografíe y les obsequie con algún delicatessen. Por lo menos, han mejorado de hábitat. Todavía se puede apreciar el lugar que hace algunos años atrás tenían para vivir. Está justo al lado del que tienen preservado ahora y la verdad que no se puede negar que nuestra especie es altamente caprichosa y un tanto esperpéntica. Según la literatura, el Duke que regentaba estas tierras cuando se estaba construyendo la ciudad, cazó la primera pieza que fue un oso y en honor a ello la bautizo con su nombre. Seguro que los osos hubieran preferido que cazara un pato o un zorro. Pero les toco a ellos. Mala suerte, oso. Nosotros también comimos una manzana y nos toco currar para el resto de la eternidad.

Vamos a descansar en un parque y aprovecharemos para comer nuestros bocatas. Este pan que compramos al panadero de Beatenberg está riquísimo. Hoy toca pechuga de pollo que acompañada de algo de queso y jamón nos sabe exquisito.

El tiempo se sigue portando por esta zona y no ha caído ni una gota. Ahora terminaremos de pasear por Berna. Vamos a atravesar la avenida principal y llegar al otro extremo, después retornaremos por la que nos devolverá al parking. Por el camino observamos los escaparates. Observo que los suizos son extremadamente caprichosos y por lo que llevamos comprobado muy clasistas. Sus escaparates rebosan de artículos de lujo y marcas por doquier a un precio desorbitado. Está claro que su poder adquisitivo es alto, según Juancho se lo llevaron calentito de los judíos en la época nazzi. Es curioso que los recordara de mi anterior visita mucho más amables y educados. No es esa mi impresión ahora.

Buscamos unos servicios en el parking antes de emprender carretera para evacuar. Hemos tenido que acceder por otra puerta para encontrarlos porque están al otro lado y para ello cruzamos la plaza de . Hay mucha gente muy arreglada en las terrazas cenando preparadas para el casino.
Cuando bajamos a los servicios un vigilante nos está esperando cortando el paso pero se ha metido de nuevo al mostrador. Me dirijo a él para preguntarle por los baños pero tiene cara de pocos amigos. Le pregunto que si habla inglés, una mueca despectiva me responde a mi pregunta, le vuelvo a insiste ahora con francés y el muy mal educado, muy impasible me suelta una parrafada en alemán. No le entiendo nada pero por los carteles he adivinado que para entrar en los baños hay que pagar 1 franco por persona. Ja ja 7 francos por mear. Decididamente estos suizos son unos snobs. Le doy las gracias muy amablemente y me despido de este señor tan educado. Como no es una urgencia pospondremos la visita al wc para más tarde y dejaremos este servicio de lujo para el que se lo pueda permitir.
La tarde se ha puesto lluviosa y estamos cansados de patear así que hemos llegado al camping y repondremos nuestras fuerzas cenando en el porche. En Beatenberg hace una tarde estupenda. Se nota que ha llovido pero ahora está totalmente despejado. Los niños se han ido inmediatamente a jugar con los conejos.. Yo he estado hablando con una inglesa que está acampada con su familia detrás de nosotros. Mañana el pronóstico es soleado y dará una tregua para ir al valle de Lauterbrunen y desde allí subir a las montañas. Me comenta que vive a una hora de Londres. La digo que yo estudié en Hasting , lo conoce, ha veraneado allí alguna vez. También me cuenta que ellos viajaban con caravana pero que tuvieron un accidente muy grande y a ahora solo lo pueden hacer en tienda. Mañana se van hacia Alemania y luego embarcarán para Inglaterra. Nos despedimos, la deseo buen viaje y ella a mi también. Es una chica muy agradable viaja con su pareja y su hija y desde que llegamos siempre la veo disfrutando de la caída de la tarde con una copa de vino en la mano. Nosotros sentados en nuestras sillas enfrente del Jungfrau, el Eiger y el Mönch y encima del lago Thun, también descorchamos la botella de vino que compramos en la Ferme du Villard acompañada de queso y longaniza. También hemos abierto una caja de bombones que compramos y que vamos a degustar en bloque pues se nos debieron deshacer en el coche y ahora están compactos. Nuestros vecinos, que no son muchos, también están en sus porches contemplando la misma postal. El momento es ideal. Los niños siguen jugando con los conejos, madre mía que juego dan estos animales. Mañana atacaremos las montañas.

Sábado 7 de Julio de 2012
LAUTERBRUNNEN- MÜREN- STECHELBERG
LAS CASCADAS DE TRÜMBELBACH

Es cierto, ha amanecido un día estupendo. Son las 7 de la mañana y ya estamos en planta. Hay que aligerar por si las nubes esta tarde quisieran amenazar. Mientras desayunamos nosotros tres, dejamos a los peques que aprovechen un poco más la cama. Desayunamos fuera delante de las montañas. La temperatura es estupenda, a las 8 de la mañana ya no es necesaria ni una chaqueta. El sol pega de lo lindo y es que estamos muy altos.

Ayer dejamos preparada la comida para hoy y para no abusar de tanto bocata llevamos en nuestros tuperware macarrones con chorizo, con lo cual una vez levantado el campamento la salida se hace a las 9.00 horas.

Hemos comprado los billetes de tren para subir hasta Lauterbrunnen y estamos esperando en el andén. El tren, por supuesto, con una puntualidad impecable llega a su hora y salimos de la estación a las 10.05. Dejamos Interlaken Ost y nos adentramos en el valle. El Jungfrau está de frente pero no estamos lo suficientemente cerca aún. Los niños van sentados en un compartimento de cuatro mirando por la ventanilla y conversando sobre sus cosas. Adrián se ha empeñado en llevar una de las mochilas grandes a cuestas. Pesa mucho porque va llena de comida y de parte de ropa que creemos podemos necesitar si cambia el tiempo. Paula y Lucía también llevan sus mochilas con la comida. Alex va más libre, solo con su palo, pero ha acordado con su hermano que se la turnarán.
Hemos llegado a Lauterbrunnen atravesando un paisaje de bosque de helecho y coníferas. Nos hemos adentrado en el valle, subiendo por él y tenemos el Jungfrau delante de nuestras narices Continuamos en el tren hasta Grüsalp ascendiendo hasta 1600 metros y nos apeamos para empalmar con un teleférico que nos llevará a Müren a 1900 . Entramos en la cabina y los cuatro peques se acoplan como pueden. La cabina va completa pero podemos hacernos un buen hueco para contemplar el ascenso. Empezamos a subir por el cable. Tenemos la pared del macizo a un paso. Es una maravilla. Los niños van exclamando y sorprendiéndose a cada paso. Nosotros también. Nos sentimos mínimos ante la grandiosidad de la naturaleza.

Hemos atravesado el pueblo de Müren andando, pues al otro lado hay otra estación donde volveremos a coger otro funicular que nos llevará a Stechelberg con una parada intermedía en Grimelpass. Los niños están alucinando en el descenso. Ahora vemos a gente caer en parapente por el valle, mientras las montañas nos arropan.

Estamos en Stelcherbeg. Nuestra excursión trata de una bajada por el valle de 2 horas. Un total de 10 km nos esperan con una temperatura yo diría que hasta bochornosa. En la mitad del sendero vamos a detenernos para visitar las cascadas de Trümelbach.

Ascendemos por un ascensor interior excavado en la roca. Va dirigido por un trabajador bastante parco en palabras. La verdad es que su trabajo es bastante tedioso. Comentamos que es como trabajar en una mina, así que su carácter está justificado. Ya estamos fuera del ascensor y podemos escuchar el sonido de la cascada. Aún hay que subir a pie por unos escalones y por el trayecto nos vamos asomando a la vertiginosa caída del agua. Es sobrecogedora la fuerza del agua. No paro de estar pendiente de los niños. Paula es la única que va suelta pero muy a mi lado. Boni y Juancho se recrean con las cámaras fotográficas. En uno de los últimos tramos el caudal del agua ya no puede bajar con más fuerza. Esta cascada se forma de las aguas que provienen de los gigantescos glaciares del Eiger, Mönch y Jungfrau. Transporta 20.000 toneladas de agua por años en un caudal de 24km2 donde la mitad esta cubierta de glaciares y nieve. ¡Hasta 20.000 litros de agua por segundo!. Las únicas cascadas en Europa dentro de una montaña y accesibles, designada por la UNESCO patrimonio de la naturaleza.

Hemos quedado encantados de la experiencia y volvemos a retomar el sendero del que nos habíamos desviado. Ya es hora de comer y hacemos un alto en el camino a la sombra de unos árboles. Tenemos hasta un banco para sentarnos. Echamos mano de nuestros macarrones. Los niños están comiendo genial. Lucía, en especial, me llama la atención porque normalmente no come mucho y aquí está devorando, yo creo que hasta ha engordado.

Tras dos horas y media de andada, hoy bastante más relajada que la de antes de ayer hemos llegado a Lauterbrunnen. Nos dirigimos a la estación, compramos el billete rápidamente y cogemos el tren que nos está esperando para llevarnos de nuevo a Interlaken. Los niños, una vez más, van ocupando un compartimento de cuatro charlando de sus cosas. Nosotros en el contiguo también sacamos nuestras impresiones del día de hoy.

Hace calor y como aún no son las cinco nos acercamos a una localidad del lago donde hemos leído que nos podemos bañar a una temperatura ideal. Pero al llegar nos damos cuenta que, efectivamente, es un lago natural el Burgeseeli pero está vallado y hay que pagar. Los suizos se desplazan hasta allí para pasar la tarde y refrescarse. A nosotros no nos convence, en particular el precio. Es muy elevado por darnos un chapuzón en unas aguas naturales en donde tanto acotamiento pierde su encanto. Decidimos regresar al camping en donde seguramente estaremos mucho más frescos.

En Beatenberg se está de lujo. Lucía y Alex corren como balas hacia los conejos. Es amor lo que tienen por ellos. Yo también voy como una bala pero a la ducha y detrás me siguen Boni y Juancho aprovechando que los niños están muy distraídos con los animalitos.
Hoy cenamos tortilla de patata, por lo que Juancho y Boni se ponen a pelar las patatas en nuestro porche. La hija de Handrestz los mira y se ríe. Ella está cortando la hierba fresca por indicación de su padre. Por un momento y afortunadamente el mundo al revés.

Hay que reconocer que Suiza tiene un paisaje sobrecogedor, solo superable por algo más sobrecogedor aún: Los Alpes acompañados de una tortilla española regada con un Rioja. Después de ducharse, los niños, que cada vez son más independientes y participativos en las tareas de la cv, han arrasado con la tortilla en un minuto y piden más, más y más….Después aprovechan para jugar un ratito más porque la temperatura y la luz de la tarde lo permiten.

Ha sido un día precioso pero desafortunadamente el tiempo va a cambiar. Una borrasca en Europa anuncia que en los próximos diez días no va a dejar de llover. Vemos el pronóstico y especialmente el miércoles la cosa se pone fatal. Nuestro planteamiento de subir a otras cimas se pone feo y la región del Valay, que es nuestra próxima etapa en dos días, no da respiro de lluvia en la montaña.
Intentamos decidir qué hacer. Los niños están ya durmiendo en las cvs. Parece mentira que mañana vaya a llover. Estamos sentados en el porche y hay estrellas en el cielo, pero estos son los Alpes y los cambios aquí son así.
No paramos de hacer combinaciones y cambio de planes. La realidad es que no podemos tener a los niños metidos en una cv los próximos días. Son nuestras vacaciones y hay que decidir. Seguimos barajando ideas con el mapa y el ordenador pero el centro de Europa está por todos los lados igual, lluvia, lluvia y más lluvia. La montaña con lluvia no tiene sentido.
Tenemos una caravana ¿no? Podemos hacer lo que queramos. Y tomamos la decisión más estrambótica. Nos vamos a la Toscana, pero mañana. Ahora, a dormir, queremos ver cómo despierta el día. Según esté daremos un giro de 360 grados o no.

Domingo 8 de Julio de 2012
BEATENBERG-LUGANO
DOS GRATAS SORPRESAS “EL GLEISHRÔNE Y LAGO DI LUGANO”

Está lloviendo a cántaros. Hemos desayunado cada uno en nuestras cvs y curiosamente el cielo ha dado una tregua después. Las montañas están cubiertas y las dos excursiones que nos quedan por aquí Grindelwald y Kandersteg son imposibles. No podemos desperdiciar nuestro precioso tiempo a expensas de un pronóstico tan caprichoso. Levantamos campamento y hemos decidido que hacia la Toscana. Pasaremos la noche en Lugano. Boni y Juancho me han dejado un par de camping para que los eche un vistazo por Internet. Mientras ellos van recogiendo el campamento yo voy buscando algún camping interesante por La Toscana en donde instalar nuestro punto neurálgico para estos próximos días.

Estamos enfilados ya. Nos despedimos de esta familia tan peculiar quizá porque su carácter y el nuestro trazan una barrera que nos hace mantener la distancia y una vez saldadas nuestras cuentas ponemos rumbo a Lugano. Bordeamos el lago Briez y lo dejamos atrás con su precioso azul turquesa y nos adentramos en Meringen que continua siendo región del Oberland Bernes. La carretera es buena, a pesar de haber abandonado hace un rato la autopista pero pronto nos adentramos en un puerto el de Halistal. Para llegar a Lugano, inevitablemente, tenemos que atravesar por alguna parte los Alpes. Esta zona cada vez se presenta más interesante. El verde no puede ser ya más intenso y mires donde mires aparecen cascadas a borbotones. Empezamos a ascender por una carretera bastante amplia para las cvs. El altímetro de Boni empieza a darnos la noticia de que estamos ya a 1600 metros. No hace falta, el precipicio que veo a través de mi ventana me lo dice todo. Las curvas cada vez se cierran más y yo envuelta en una especie de emoción y nerviosísmo saco la cámara e intento hacer fotos por la ventanilla a las cascadas y los neveros que encuentro delante de mi y caen por el precipicio. El paisaje no puede ser más alucinante. Seguimos subiendo. Motos, deportivos y coches de época nos adelantan y cruzan por el otro carril. Nada en este puerto es normal. Seguimos subiendo, el reloj marca los 1800. No teníamos ni idea de que íbamos a atravesar una montaña así. En una curva está la policía pero no nos para ni nos dice nada. Eso será que está permitido. De repente, joder estamos casi a 2000 metros y un glaciar delante de nuestras narices. No podemos ni comunicarnos con los Walkis. Estamos tan concentrados por el espectáculo, por el precipicio que solo acertamos a decir joder dónde coños nos hemos metido ahora.¿ Si seguimos subiendo!. Hemos llegado a 2200 metros y estamos en la cota con nuestras cvs. Orillamos los vehículos para hacer una parada y apreciar de cerca este glaciar. El nacimiento del Ródano. Los tres coincidimos en lo mismo, qué regalo de despedida. Los niños bajan a tocar la nieve helada.
Ahora con mucho cuidado y sin calentar los frenos empieza el descenso. Una hilera de motos tienen que soportar detrás de nosotros. Yo, a veces, aguanto la respiración y conforme descendemos me voy relajando y despidiendo de esa estampa que no puedo apartar de la retina. Hurra, Hurra, por estos dos conductores,

Estamos en Lugano y hemos elegido un camping en el lago para dormir. Estamos cerca de la tierra de mi amiga Mónica y no puedo enviarla ni un whatsap, ni un correo pues no tengo wifi disponible.
Nos hemos registrado en el camping y hemos elegido dos parcelas. Tenemos acceso directo al lago y una piscina muy calentita que a las horas que llegamos está prácticamente vacía. Hace un calor espantoso y venimos cansados de tantos kilómetros. La piscina y el lago ha sido un oasis para todos nosotros, en especial para los peques que se han vuelto como locos cuando lo han visto.

Después de un gran baño refrescante y una buena ducha cenamos y nos relajamos jugando a las cartas en el porche que hemos montado. El camping tiene un enclave precioso. Mi amiga Mónica es del Lago Maggiore no muy lejos de dónde nos encontramos. No vamos a pasar por ahí pero tengo que decirla que me parece un lugar encantador, aunque tiene razón, los mosquitos a la caída de la tarde son un poco insoportables. Hemos montado la casa en un abrir y cerrar de ojos. Desde luego nos hemos convertido en unos auténticos campistas y el mover sigue causando estragos allá por donde va. Danke, Merci, Chao Suiza..sin duda regresaremos en otra ocasión

Lunes 9de Julio de 2012
LUGANO- PASSO DELLA FUTA
EL TRÁNSITO

El viaje ha transcurrido tranquilo. Dejamos atrás una vegetación alpina exuberante y estamos adentrándonos en el bosque mediterráneo, llegando a la Toscana. Ayer desde Beatenberg envíe un correo a un camping situado allí llamado La Futa. Es imposible obtener respuesta de ellos porque no hemos tenido wifi en todo este tiempo. Así que en una parada de descanso voy a llamar para cerciorarme de que hay plazas.

He hablado con un italiano que me dice que sí recibieron nuestro correo. Me confirma que no hay problemas de plazas y me da las indicaciones oportunas para llegar a él. Según el italiano no tiene pérdida, solo hay que desviarse al final por una carretera de montaña que nos subirá a 900 metros. He intentado elegir un camping tranquilo y bonito. Es difícil no encontrar por aquí camping de resort, sobre todo en la costa. Por ese motivo nos hemos adentrado en la Toscana.

Por fin hemos llegado al camping. Hemos acertado en nuestra elección. Se encuentra en un bosque natural, en lo alto del monte. Hace mucho calor, pero tenemos una piscina para refrescarnos. Hacemos el chequeo y nos vamos a colocar nuestras cvs. Tenemos ganas de descansar y estamos hambrientos, pero antes hay que preparar el campamento. A Juancho se le han abierto por el camino dos maleteros y además de todo lo de siempre tiene que fregar la cv, pues se ha volcado la harina.

Ya estamos instalados, comemos y tomamos un café vienes. Los niños se han ido a un parque con cama elástica y toboganes. Estamos en plena naturaleza. Esto es grande pero no hay mucha gente. Luego nos acercamos a la cafetería del recinto donde tenemos la posibilidad de conectarnos a Internet para preparar los días por aquí. Boni y los niños se bañan, también jugamos al ping pong y al futbolín. Huele a pizza que alimente. Estamos en Italia y el restaurante se ha llenado de gente para cenar. Nosotros lo pospondremos para otro día, por supuesto. Paseamos un poco por el bosque y nos vamos a cenar algo. Antes de irnos a la cama los cuatro niños juegan a las cartas un rato, mientras yo me pongo al día con mi diario y Juancho y Boni terminan de fregar los platos. Hace bastante fresco y he tenido que bajar y cerrar todas las ventanas. Aquí la temperatura baja por la noche. Vamos a dormir a gusto. Mañana empezaremos por Florencia.

Martes 10 de Julio de 2012
FLORENCIA
La familia Raposo y Pozuelo visitan a Los Medicci

Hemos dormido estupendamente tal y como pronosticamos. Pronto preparamos nuestros bocatas y emprendemos rumbo a Florencia. Hemos elegido la carretera comarcal para llegar hasta allí porque no queremos prescindir del paisaje. La carretera es una borrachera de curvas ocultas en una montaña de frondoso bosque y campiña en donde se cultiva vino, el famoso de Chianti que da nombre a una de las comarcas de la Toscana. Nosotros estamos en Mugello, otro territorio constituido por un amplio valle al norte de Florencia, delimitado por las montañas de los Apeninos en su parte septentrional, por los montes de la Calvana al oeste y por el grupo Monte Morello-Monte Giovi al sur.Al parecer, el nombre de Mugello deriva de los primeros habitantes del valle, los ligures Magelli, a los que siguieron los etruscos y más tarde los romanos. Durante la edad meis fue tierra de feudos pero es a partir del SIV cuando la zona vive un periodo decisivo de desarrollo económico y social, entre otras cosas gracias a la ascensión de los Médicis, la famosa familia florentina originaria de estas tierras y protagonista de la historia Toscana desde el siglo XIV hasta principios del S. XVIII. Entre la vegetación, de vez en cuando puedo detectar alguna casa Toscana. Pronto divisamos Florencia. La entrada desde lo alto de la montaña tiene una estampa preciosa. La cúpula del Duomo acapara desde lejos el centro de todas las miradas y vaticina que nos espera una ciudad de un valor artístico incalculable donde el Renacimiento hizo mella y sus vestigios son un testimonio palpable de una época de bonanza riqueza.

Hemos dejado los coches en un parking lo más próximo al casco histórico. Lo primero que hacemos al adentrarnos en Florencia es localizar la Piazza di Duomo. Hace mucho calor pero no importa, sabemos que estamos en verano y en Italia. Hemos recorrido ya unos 400 metros por una calle bastante estrecha donde tenemos que estar muy atentos para que los coches que pueden transitar por esas calles no nos rebanen algún pie. Por fín alcanzamos la plaza por un lateral. Los niños van atentos, no estoy muy segura de cuáles son sus expectativas pero de momento no protestan.

La fachada de la catedral es una obra maestra. La combinación de los colores del mármol me deja boquiabierta. La portada de la fachada principal tiene un recargamiento exagerado pero no deja duda de que en esta parte del mundo y en una época concreta que abarca 200 años hay una motivación de creación y superación para el hombre fascinante. El Baptisterio, inspirado en el Pantheon de Roma es aún más vistoso y ya es decir. Bordeamos toda la fachada y les pregunto a los niños qué les parece, me contestan todos que muy bonito. Entiendo que no puedan apreciar del todo esta obra maestra pero algún día la tendrán que recordar en los libros y entonces valorarán que ellos estuvieron allí, en aquél sitio donde los mayores no parábamos de exclamar de fascinación y ellos de preguntarme al ver mi cara ¿Qué te pasa?.

Estamos esperando una cola no muy larga para visitar la catedral por dentro. En la espera una mujer oriental que está vendiendo pañuelos me avisa de que tendré que necesitar alguno si quiero adentrarme en la iglesia. De momento no caigo y creo que me está indicando que tendré frío dentro. Al momento me doy cuenta que estoy en Italia, en la cuna del Vaticano. Aquí, además de una ferviente devoción hay todavía cierto puritanismo. Tendré que cubrir mis hombros y no se si tenemos algo para que yo utilice. Juancho me presta un fular. Boni no está del todo convencido y mientras esperamos para entrar intento explicarles a los niños, porque me lo han preguntado, por qué me tengo que cubrir los hombros.

Al final no ha hecho falta porque mi camiseta es bastante recatada. Lo que más me gusta del interior, por supuesto es su cúpula. Diseñada por Bruneleschi se erigió sin andamios y se instaló en planchas enteras. La cúpula está sustentada por arquivoltas y contrafuertes laterales, adosadas a los muros. Es imposible imaginar cómo se las ideaban para montar todo esto.

Hemos gastado bastante tiempo en visitar la plaza, la catedral y el complejo de la catedral. Paula ha elegido para caminar hoy un zapato nada recomendable y claro, con el calor que está haciendo le empieza a pasar factura. Están empezando a formarsela rozaduras en los dos pies. Antes de dirigirnos a visitar el David de Miguel Angel paramos para ponerla dos compex. Solucionado, podemos seguir caminando.

Estamos en la Galeria del Museo y tenmos que soportar una cola bastante larga y al sol si queremos ver de cerca el David. Vamos a intentarlo……tic tac

Hemos puesto a los niños en la otra acera donde hay sombra. Están sentados y me sorprende positivamente cómo aguantan sin rechistar y sobre todo, la ilusión que le ponen. Ellos no saben quién ése tal David, y por qué tanta expectación para contemplarlo. Hacemos turnos en la cola soportando estoicamente al sol. Es el turno de Juancho y de lejos observo cómo ha indicado a todo el mundo de la fila que se desplace hacia la izquierda de la calle donde da la sombra. Sabia decisión. Todo el mundo secunda la idea, excepto una japonesa que se resiste al sol con una pamela. Dura de pelar.

He turnado a Juancho y después de 45 minutos no hemos avanzado mucho. Hay dos tipos de registro, con reserva y sin ella y claro los que han reservado previamente entran con preferencia, por lo que nuestra fila avanza a cuenta gotas. Los niños han abierto el bocata y han empezado a comer pero con este calor es imposible terminarlo. Yo he hilado la hebra con un italiano de rasgos orientalales, algo amanerado que me dice que es de Torino. Intercambiamos impresiones del tiempo de España., de nuestra crisis, de la suya, en fin la cola no avanza. Unos mexicanos se han parado también a hablar. Desisten del intento, son las 3.45 y tienen que coger el bus del grupo en tres cuartos de hora. Ahora empiezo a hablar con ellos también. El italiano intenta cazar algo de la conversación pero le resulta complicado. Boni se acerca. Nosotros también nos lo pensamos mejor, quizá en 2 horas con un poco de suerte hayamos alcanzado nuestra meta pero es una canallada para los niños. Desistimos del intento y nos apartamos de la cola despidiéndonos de nuestros compañeros de fatigas y deseándoles buena estancia.

Los niños se han quedado un poco decepcionados. No sabían muy bien qué hacíamos allí pero se lo habían asumido muy bien. Le restamos importancia, sobre todo yo que era la más interesada en admirar El David. Alex me pregunta- ¿Estábamos esperando todo este tiempo para una escultura sólo? ¡Ah bueno! Yo creía que eran más.-

Nos dirigimos al Puente Vechio pero para llegar hasta allí hemos parado en la Piazza
Donde curiosamente hay una reproducción del David exacta. Bueno eso es suficiente. Eso y unos helados para todos nos reconforta. Menos a Paula que la veo llegar desconsolada pues se acaba de dar cuenta que acaba de perder sus maravillosas Ray Ban. La intento explicar que no sufra que solo son unas gafas que habrá oportunidad de tener otras y qué eso le pasa a todo el mundo. Llora con tanta pena la pobre que hasta su padre ha decidido restar importancia.

Seguimos caminando por la ciudad. A cada paso y a cada lado hay una obra de arte. Fachadas, edificios enteros, calles adoquinadas nos indican que estamos en la cuna del Renacimiento donde Leonardo Da Vinci, Rafael, Miguel Angel, Donatello, etc… tuvieron sus días de gloria.

Nos hemos fotografiado todos en el puente Vechio y ahora atravesamos la calle llena de vida, hay una buena perspectiva desde aquí. Llevamos pateando la ciudad 6 horas. Evidentemente, es una ciudad para estar dos semanas si te gusta el arte y aún así te irías con la sensación de que no es suficiente. Pero para nosotros, y sobre todo para los niños sí que lo es, por lo que nos dirigimos al aparcamiento y por el camino seguimos admirando la riqueza de sus monumentos.

Son las 20.00horas y estamos en el camping ya. Vamos a ducharnos y después cenaremos en la pizzeria casera del campeggio como así lo llaman por aquí.

Nos han proporcionado tres mesas juntas al fondo para cenar. El entorno es muy agradable. Desde las mesas podemos observar toda la montaña. El camping esta enclavado en un paraje de la Toscana muy bonito. Está regentado por una familia italiana muy simpática. En general por estas tierras te sientes como en casa. Tienen la misma expresividad que nosotros y nuestro tono de voz aquí no destaca como en otras partes de Europa. La mamma ha venido ha tomarnos nota. Entre bromas y risas, comunicándonos en italiano y español conseguimos todos pedir. En total 5 cuatro quesos y dos especialidad de la Futa que entre otros ingredientes llevan spec, un embutido que ya he tenido ocasión de probar a través de mi amiga Mónica y que está riquísimo. Paula y yo nos hemos decantado por esta última opción y los mayores lo vamos a acompañar con un vino tinto de la tierra.

Hemos cenado genial y nos han atendido estupendamente. Esta mamma es un punto. Su expresión no tiene desperdicio, me llama mucho la atención como exagera las palabras y lo cariñosa que es con los bambinos como los llama ella.

El día ha sido genial. Después de una visita tan enriquecedora y con la tripa llena nos retiramos a nuestras cvs. Son la 11.30 de la noche y dejamos que esta gente se vaya a dormir también. El pizzerollo también se lo ha ganado. Chao.

Miércoles 11 de Julio de 2012
PISA
DE LA TORRE INCLINADA A LA PLAYA TOSCANA

Hoy nos hemos desplazado a Pisa. Nuestro objetivo, por supuesto, es visitar la torre y el baptisterio. Los niños están deseando conocerlo, en especial Alex que tiene que contárselo a su amigo Jorge López que ya estuvo aquí la pasada semana santa.

Hace un sol de justicia. Nos adentramos por las calles para llegar a la piazza. El casco histórico está bastante deteriorado pero deja entre ver una ciudad que alcanzó también su momento álgido por supuesto, nada comparable a la riqueza artística y cultural de Florencia pero no por eso desechable.

Hemos llegado a la Piazza y ya la divisamos. Acampamos literalmente en una esquina del césped para hacernos fotografías y observar su inclinación. Conforme vamos bordeando la plaza nos damos se detecta mejor su inclinación. Los niños al principio no han quedado muy impresionados cuando hemos llegado. Pero a medida que nos vamos acercando a ella se van quedando perplejos. Todos nos vamos quedando impresionados. La Torre de Pizza es uno de esos monumentos que hay que apreciar en directo para que te sorprenda. Para mi gusto es muy elegante y junto al Baptisterio conforman un conjunto muy armónico. He estado escuchando a una guía que va dando explicaciones a un grupo de alemanes. Por lo visto, de 2001 hasta la fecha la inclinación ha aumentado hasta casi medio metro. Durante 11 años estuvo prohibido subir al campanario pero posteriormente el gobierno lo autorizó, aunque no son muchos los intrépidos, puesto que supone un peligro la inclinación y no se puede permanecer más de veinte minutos arriba. Hemos bordeado del todo la plaza y desde esta nueva perspectiva podemos observar al máximo la inclinación. ¡Ahora sí que está torcida!- exclamamos todos.
Nos paramos en un puesto de artículos para recuerdo y Alex ha decidido comprarse una camiseta de Burn Simpson sujetando la Torre. Está contentísimo igual que su prima Lucía que ha comprado una camiseta a su hermana, la pequeña. Paula ya se compró un bolso de playa en Florencia y Adrián aún no ha elegido nada, dice que va a esperar a que le apetezca algo mucho. La plaza es un trasiego de gente. Es curioso pensar cómo una ciudad puede vivir sólo de eso: De un error.

Hace mucho calor y una vez visto el conjunto de la Piazza nos dirigimos a los coches para salir de la ciudad y acercarnos a la playa. Hemos estado 3 horas en Pisa y salvo pasear un poco por las calles de acceso a la torre, el tiempo restante lo hemos empleado en disfrutar de la Torre y el Baptisterio. Nos ha encantado a todos.

Después de comer en un área de servicio con nuestros tuperware hemos llegado a una playa en la costa. Nuestra idea es tomar un helado y que los niños se bañen un poco. Hemos acertado de pleno. Primero nos refrescamos por dentro en una terraza al lado de la playa pidiendo siete granizados, luego nos ponemos los bañadores y nos vamos a la playa. La arena es fina y el mar está como una balsa. En la playa todavía queda gente a pesar de ser ya tarde para ellos. Para los niños y Boni hay una sorpresa más. El agua está templada a, bueno caliente yo diría y todos permanecen en el agua desde que llegamos hasta que nos vamos. Yo no. No suelo aguantar en el agua tan caliente, pero una vez que he salido de ella, me tumbo a observar a los corrillos italianos de gente mayor que se agrupan en sillas con sus sombrillas y hablan amenamente. Es como estar en casa. De frente, dos jubilados hablando de política. A sus mujeres no puedo entenderlas pero sus gestos me informan de que se lo están pasando bien. No hay más que ver las caras y los cuchicheos. Alguna abuela y la nuera o la hija con el nieto en su primer verano en la playa, y así podría seguir observando. No es muy diferente a una playa española, salvo el idioma claro y mis chicos al fondo que siguen disfrutando como peces en el agua.
La tarde está ya más que finalizada. Son las 8.30, yo diría pasadas y hay un largo trayecto en carretera para llegar al camping, así que levantamos campamento y nos ponemos en marcha. Ahora a esquivar las locuras de estos terribles conductores, los italianos. Madre mía, la mayoría no respetan nada, ni líneas continuas, ni adelantamientos por la derecha. Se cruzan como balas y hasta los camiones se permiten el lujo de acosar y adelantar por el carril de la izda. Entre las curvas de la autopista y las pirulas de los italianos es imposible dormirse. Es como estar en el circuito pero sin Alonso ni Hamilton.
Prueba superada.Por fín hemos llegado al camping. Son las 11.30 y en el restaurante todavía hay actividad. La mamma y el pizzerolo andan aún haciendo pizzas para los holandeses, pues el camping está plagado de ellos. Nosotros pasamos de largo con nuestros coches y nos vamos a dormir. Domani Siena. Chao



Jueves 12 de Julio 2012
SIENA
La Piazza Il Campo

Hoy vamos a pasar la mañana en La Futa para que los niños disfruten un poco del camping. Todos los días la mañana despierta nublada pero poco a poco las nubes se van disipando dejando paso al sol que en menos de tres horas calienta de lo lindo. A pesar de ello la temperatura es muy agradable. Además, el enclave del camping dentro del bosque hace que los árboles nos protejan de las horas álgidas de calor. La piscina no es muy grande pero lo suficientemente relajante para que nos refresquemos y descansemos en las hamacas contemplando la montaña de la Toscana. En la parte superior hay columpios y una cama elástica en donde los cuatro niños no paran de saltar y hacer competiciones de saltos. Además aprovechamos también para hacer las coladas y tender al sol toda nuestra ropa. Boni ha preparado un par de cuerdas muy prácticas para tender y entre el sol y la brisa del medio día estará lista y seca para recoger antes de nuestra salida a Siena. Además Adrián nos está ayudando y hasta se ha animado a pedir una ficha en ingles en recepción para que podamos echar a la lavadora. Ha venido tan contento con ella y un sobre de detergente. Me gusta como van siendo cada vez más independientes y colaboradores.

Después de recoger los platos de la comida y preparar nuestros bocatas para cenar nos disponemos a salir. Pronto nos adentramos en la comarca de Chianti, célebre en todo el mundo por su producción vinícola, este territorio se caracteriza por un continuo alternado de valles y suaves colinas cubiertas de viñedos y olivos, pero también de robles, cipreses y pinos. El área entera está salpicada de aldeas, parroquias rurales, abadías y fortalezas. También de casas hechas con una arquitectura de materiales sencillos y cálidos como la terracota, la piedra serena que a lo largo del tiempo se han amalgamado con el paisaje natural consiguiendo un efecto de sugestiva armonía.

Son las 6 de la tarde y acabamos de aparcar a las afueras de Siena. La ciudad está franqueada por un arco enclavada en lo alto de una colina. Accedemos a ella por una batería de escaleras mecánicas que han facilitado al visitante para poder subir sin dificultad. Pronto alcanzamos el casco antiguo y nos adentramos en las entrañas de esta ciudad.
Buscamos la catedral del Duomo y entramos por ella por unas escalinatas laterales. Impresionante la fachada de la catedral. De estilo gótico toscano y tardío te deja sin palabras esta iglesia dedicada a la virgen de la Asunción. Enfrente de la portada y al fondo de la pequeña e irregular plaza hay una especie de poyete en donde la gente se sienta a contemplar este espectáculo artístico. Son las 6.30 y me dirijo al personal de la entrada para informarme hasta qué hora se puede visitar por dentro. Me dice que faltan 35 minutos para cerrar. Es poco tiempo para contemplar por dentro este edificio pero si nos damos prisa podremos disfrutar un poco la catedral por dentro. Estamos dentro de la basílica y esta visita no tiene desperdicio para ninguno de los siete. Nos detenemos contemplando la cubierta y la cúpula del crucero. El mármol a dos colores se intercala en la dovelas de las arcadas que atraviesan la nave longitudinal del edificio. En una de las capillas las pinturas de frescos son una impresionante borrachera de colorido. Me impacta sobre todo la decoración excesiva de estas iglesias que me hace pensar en una época de derroche y ostentación en donde unos desarrollaban su poder, otros tanto su capacidad de creación artística y el resto su sometimiento, en algunos casos consentido, para picar y llevar a cabo lo que ahora contemplamos.

Seguimos paseando por las calles de Siena. Hay muchos turistas, como en Florencia y en Pisa pero ninguno español. No me sorprende en absoluto. España atraviesa grandes dificultades y los españoles en otro tiempo muy motivados para este tipo de viajes no estamos pasando por un buen momento.

Paseando por las calles adoquinadas hemos llegado a la Piazza de Il Campo. ¡Qué bonita y qué agradable es esta plaza y permanecer en este lugar durante un buen rato! La plaza, de un área bastante extensa e irregular tiene una caída hacía el centro donde debe converger el agua de la lluvia. En otro tiempo fue el centro de espectáculos para la ciudad, en donde se realizaban carreras de caballos e imagino que otro tipo de eventos.
Los niños no paran de correr de un lado para otro, hay un ambiente variado, nosotros para unirnos al popurrí vamos a sacar nuestros bocatas y comérnoslos ahí sentados. Hacemos una especie de corrillo delante del palacio renacentista que se extienda ante nuestros ojos. La luz es ideal y Juancho y Boni se dedican a hacer fotos a los cuatro peques mientras hacen carreras de relevos alrededor de la plaza.

Una vez terminado el bocata que a la caída de la tarde y en esta plaza nos sabe de lujo vamos a seguir paseando por Siena. Calles y calles se entremezclan franqueadas por portalones y heráldicas que nos informan a cada paso de lo que esta ciudad tuvo que ser desde la edad media hasta el S.XVIII. ¡Qué encanto de ciudad! Se respira un aire polivalente en el ambiente. En donde los jóvenes sieneses se preparan para la noche y los turistas como nosotros terminan de cenar en los veladores y en los restaurantes de la ciudad.
Ya ha anochecido y antes de ir hacia los coches decidimos pasar otro rato más en la piazza il Campo. Tenemos por delante unas dos horas de viaje pero no importa vamos a permanecer un ratito más en esta plaza. La temperatura es ideal y los niños quieran segur corriendo por ella así que nos sentamos una vez más y disfrutamos. Después de media hora o así nos adentramos por el otro lado de las calles para ir acercándonos a los coches. Pasamos por una calle que ha debido estar celebrando algo, una especie de peña o asociación, pues la calle está iluminada y engalanada de banderas y están terminando de recoger tableros y sillas de madera.

Estamos ya en la autopista y llegar al camping se hace bastante estresante en algunos tramos. Los italianos conducen peligrosamente. Son muy temperamentales al volante y en especial los camiones se hacen duros por algunos tramos de curvas. En ocasiones se cruzan del carril derecho al izquierdo a una velocidad exagerada. Nosotros vamos a un buen ritmo pero a esta gente no le debe parecer suficiente. Sin caer en generalizaciones porque no me suelen gustar y sin que se ofenda mi amiga, si en alguna ocasión lee esto, son bastante imprudentes…. Pero por fín estamos en la puerta del camping. Intentamos entrar en silencio, todo lo que el motor nos permite porque son las 12.30 de la noche y no está permitido entrar a esas horas con el coche. Pero ya estamos en nuestras cvs. Estamos todos agotados. Nos vamos a dormir.

Viernes 13 de Julio de 2012
Borgno de San Lorenzo


Hoy se ha levantado nublado pero despejará en un par de horas. La información de turismo que nos facilitó algunos mapas en Florencia nos recomendó este pueblo cerca del camping, así que nos acercaremos por la mañana y regresaremos a comer a nuestra cvs. Después tendremos toda la tarde para preparar el viaje para mañana mientras los niños disfrutan en la cama elástica y en la piscina.

Hemos aparcado en el pueblo y, la verdad, es un casco de callejuelas estrechas muy pintoresco pero que no es muy interesante después de ver la maravilla de ciudades que hemos visitado. No obstante, hace mucho calor por lo que aprovecharemos para sentarnos en una terraza de una placita a tomarnos unos refrescos. Cogemos 7 sillas alrededor de una pequeña mesa velador debajo de una sombrilla y nos tomamos nuestras bebidas. Los niños han pedido soda de limón y Fanta de naranja y entre sorbo y sorbo intentan hacer de las suyas. Después nos despedimos de este paseo Light y regresamos a la Futa.

Después de comer y mientras tomamos un café en el bar donde hay wifi aprovechamos para elegir la ruta y ver los camping en nuestro trayecto de mañana. Ya decidimos ayer tirar hacia la costa azul para quedarnos allí dos días y visitar Saint Tropez por se una de las localidades más interesantes de la costa para visitar. Nos hemos pedido un capuchino, que está delicioso pero Internet no va demasiado bien, así que un poco hartos de atascarnos, tomamos nota de algunos teléfonos, en especial de uno que nos ha gustado bastante y que tiene acceso a la playa y al que intentaremos llamar mañana cuando hayamos pasado a territorio francés. Ahora disfrutamos un poco en las hamacas de la piscina charlando los tres de la situación económica de España, mientras nuestros hijos inconscientes de lo que está sucediendo en nuestro país, pero no ajenos a la situación saltan en la cama elástica sin parar de reír.
Son las 8.30 de la tarde y vamos a preparar alguna comida en la chef para seguir teniendo existencias para el viaje. Mañana el trayecto será largo, por lo que una ensalada de patata fría será estupendo para no tener que calentar. También preparamos algo de arroz que en contra de todo pronóstico, porque esta maquinita nunca falla, ha salido algo duro y habrá que arreglar en la olla para poderlo degustar.

Todo está listo para emprender el viaje. Todos duchados, todo recogido, hemos liquidado la factura y nos despedimos de esa familia dejando en su tablón saludos y agradecimiento de parte de todos por su amabilidad y los gratos días que hemos pasado por aquí. Buena gente estos italianos. Uno de los hermanos tiene una camiseta que dice “traficante, puta madre” nos la ha señalado esta tarde cuando nos sirvió los cafés y se ha reído pícaramente. Nosotros hemos asentido con nuestras risas de complicidad y es que los italianos y los españoles somos muy parecidos, como ellos muy bien nos han dicho en las conversaciones de estos días atrás. El idioma, el temperamento, ¡ la economía! Bueno yo le pondría solo una pequeña diferencia que ellos son subcampeones y nosotros campeones de Europa! Bromas a parte muy recomendable este campeggio, como se dice por aquí, si alguien viene a visitar La Toscana! Arrivederchi!

Sábado 14 de Julio de 2012
PASSO DE LA FUTA- FREJUS
El Cumpleaños de Boni y la Costa Azul


Son las 7.30 de la mañana y lo primero que hago es felicitar a mi queridísimo marido por su 39 cumpleaños que pasará como un campeón al volante y en la carretera. Después Adrián y Alex son los siguientes en hacerlo,. No ha hecho falta recordárselo pues cuando lo he ido a hacer ya habían felicitado a su papi. Tampoco a sus sobrinas Paula y Lucía que a través del cristal también han hecho lo propio junto a Juancho. Salimos del camping despidiéndonos con una ademán de manos de todos los que hay en la puerta. Pero cuando miramos hacia atrás, nos damos cuenta que el coche de Juancho es demasiado largo y no puede girar por la puerta sin hacer maniobra. Cuando me bajo del coche para poder dirigirlo ya hay alrededor cuatro italianos del camping dispuestos a ayudár. Es muy difícil atravesar la verja sin rayar la cv pero entre todos lo están intentando, en especial Juancho que se ha convertido en un crack de las maniobras con cv. Al fina,l para que no se deje el embrague en el intento todos a una como Fuenteovejuna empujan la cv para que el coche pueda tirar y no se cale. ¡Prueba superada! El caracol ha tirado milla y yo, como siempre, como los ferroviarios de antaño que cogen el tren en marcha, después de lanzar miles de gracias por todo, en especial por esto y entre manos y besos echo una carrerita y me subo a mi caracol.

El trayecto está transcurriendo sin ningún problema y tranquilo. Pronto alcanzamos el norte de Italia sentido Génova. El paisaje es muy frondoso y verde. Además hay algo de lluvia y se puede apreciar la que está cayendo por los Alpes. Sabia decisión la que tomamos ya hace una semana. Ahora vamos a la Côte d’Azur en donde podremos disfrutar del mar y su costa un par de días siempre que encontremos alojamiento. Hemos parado antes de San Remo en un área para comer nuestra ensaladilla y también aprovechamos la ocasión para cantar el cumpleaños a Boni. Los siete, sin mucha parafernalia lo hemos apañado así y recordamos a los niños que cualquier día es bueno para celebrar que uno está vivo. Quizá es un buen momento para hacer balance de lo que uno ha vivido y le podría quedar y así disfrutar al máximo sin desaprovechar un minuto de la vida en lo que no te apetece hacer. En cuanto al regalo, hemos decidido entre Adrián, Alex y yo que la Costa Azul y en general este viaje en tan buena compañía, servirá como presente.

¡Qué bien llevamos recorrido más de 400 km y una vez pisado suelo francés me he puesto manos a la obra y he llamado por teléfono al camping Bonporteau en Port Grimaud, uno de los que habíamos elegido por su enclave, pero está completo! Además no nos habíamos percatado de que hoy en Francia es fiesta nacional, es fin de semana y salida y entrada de vacaciones, pues estamos a mediados de julio.
Ya llevo más de 4 llamadas y no consigo dos plazas para esta noche. Tenemos que parar en el área más próxima de servicio y reorganizarnos porque además, los kilómetros pesan para este par de conductores.
Por suerte, uno de los camping Le Pins Parasol se ha apiadado de mis súplicas y nos ha garantizado dos plazas para las cvs. Estamos a 40 km de allí, por lo que creo que en media hora estaremos.
Por fín!! Bajo del coche y una señora se adelanta a mí para indicarme que la primera cv la avance más allá de la barrera para que deje pasar los coches y la otra permanezca todavía ahí. Intentamos hacer el cheking y dentro de recepción nos espera un hombre, que a partir de este momento paso a llamarlo “El Gentelman” por el tono de voz y los aires de grandeza con los que se dirige a nosotros, en especial a mí. Acordamos 3 noches con mucha dificultad y me invita a chequear las parcelas que nos ha asignado para que demos nuestra aprobación. Volvemos de revisarlas, le decimos que nos parecen bien. Entonces me vuelve a demandar el documento de identidad y me empiezo a dar cuenta del rechazo que le producimos. No lo puede disimular. A estas alturas yo creo que debe se el dueño del cotarro .Tenemos tanto feeling que en menos de 5 minutos ya hemos utilizado 3 idiomas para comunicarnos. Ahora él intenta responderme en español. No me gusta faltar a la gente, y menos por escrito, pero se ha ganado el título del más estúpido, con creces. Mientras tanto mi hermano está haciendo el registro con la señora que me atendió por teléfono y le está yendo mucho mejor. Nos han ofrecido pagar por adelantado en cash y lo hemos preferido, pero como Boni está fuera y yo no llevo dinero le pido a Juancho que me preste 100 euros que me faltan y para ello tengo que esperar hasta que termine sus asuntos, pues no le quiero interrumpir. El monsieur no ha dado al botón de de la impresora para extender la factura hasta que no ha tenido los billetes en su mano y los ha contado, a pesar de entender perfectamente que estaba esperando a que mi hermano me prestara el dinero. Decididamente este es el principio de una buena amistad. Cuando me entrega la factura me da las últimas explicaciones en su perfecto francés, entregándome un plano y me recalca que no se puede bañar en la piscina si no se va vestido con traje de baño y que además se cierra puntualmente a las 7 de la tarde (con la fresquita). Son las 6.30 y Paula entra en ese momento en la recepción con la ilusión de darse un baño pero inmediatamente la digo que se la vaya quitando de la cabeza pues cierran a las 7. El gentleman interviene en la conversación diciendo que todavía tiene 25 minutos, yo le miro y pienso que sí, que yo también tengo una tía en Alcalá. Boni está haciendo maniobras marcha atrás porque unos minutos antes le han hecho retirarse a un lado del camino y ahora tiene que coger una calle que ha dejado atrás, tenemos que acoplar el campamento de las cvs y el cantamañanas éste, después de no haber facilitado ni un ápice las cosas me viene diciendo que tenemos 25 minutos para podernos darnos un bañito en la piscina. Debe ser un master de gestión de tiempo lo que me está intentando dar en su perfecto francés.

Después de algo más de 25 minutos estamos perfectamente acoplados en nuestras parcelas. Solo hemos tenido que cambiar nuestro cable a otra entrada de corriente pues la nuestra no funcionaba. Ahora, nos sentamos en las mesas del porche que cada una de las dos cvs tenemos separadas por un seto de adelfas y tomamos un respiro. La temperatura es buena y guardamos el nórdico de nuestra cama y las sudaderas, pues aquí ya no lo vamos a necesitar. Mañana más.

Domingo 15 de Julio de 2012
PLAGE DE SAINT-AYGUL - SAINT TRÔPEZ
Hoy nos tomamos con filosofía la excursión. Juancho y Boni vienen de comprar el pan en una pequeña panadería que hay en el camping. Desde luego, este pan francés se come solo. Boni está preparando el desayuno como todos los días y me avisa que acaba de saltar el diferencial de la luz. Bingo! Me ha tocado ir a recepción a avisar para que nos suban el diferencial. En recepción solo esta la señora que nos atendió ayer, pero está hablando con unos clientes, así que me toca esperar a que terminen. De repente, hace su entrada maestra el gentleman. Tarda en dirigirse a mi hasta que le doy los buenos días y le explico que no tenemos luz. En su perfecto francés me ha contestado que ahora va a verlo, pero por su entonación y su expresión corporal bien podría estar diciendo que –no es su problema ó que le importa un comino. Regreso a la cv y cuando le estoy contando todo esto a Boni se presenta nuestro gentleman. Abre el candado del cajetín con una llave y cuando se gira hacia nosotros nos exclama en español- ¡solo 6 Amperios!. No debe saber decir nada más porque ha continuado en línea recta sin girar el cuerpo y se ha retirado a sus aposentos, imagino. Boni se queda extrañado y me dice que es imposible porque hemos estado en varios camping con esa potencia y no hemos tenido problemas. En ese momento llega Juancho de su cv para disponerse a desayunar con nosotros y le endosamos la tostadora. Esta vez si se va la luz que sea la de su parcela y lo diga él….
No ha habido problemas. De todas formas, tenemos otro diferencial disponible si salta porque el gentleman ya ha aprovechado y ha subido el que ayer no funcionaba.

Estamos en la playa. Hemos elegido la que parece más salvaje y, la verdad, acertamos. La Costa tiene un azul intenso como su propio nombre indica. Aquí, la construcción, a pesar del turismo, no ha hecho estragos. Los pinares permanecen intactos y las playas de blanca arena se pueden apreciar sin ninguna contaminación de hoteles y apartamentos. Los franceses son extremadamente cuidadosos a la hora de preservar su estética y eso ha tenido un impacto notable también en la naturaleza. Son las 12 de la mañana y estamos en la playa de Saint Ayguff. Solo se puede divisar la localidad de Frejus justo en la otra bahía pero en la zona donde estamos se puede perfilar sin problemas una costa preciosa, con suaves acantilados que penetran el el azul intenso del mar. El cielo está despejado y hay viento pero la temperatura es muy agradable y podemos disfrutar en ella con una buena protección solar. Los niños van como locos a la orilla para probar el agua y Alex se gira para dar su veredicto como siempre- Papá 18 grados, el agua está a 18. ¡Uy que sorpresa, el Mediterráneo a 18º! A mi no es que me importe mucho, la vedad, pero la recordaba mucho más cálida. A pesar de ello, es inevitable zambullirse y todos lo hemos hecho para disfrutar de esta mañana de playa. Efectivamente, Alex no se ha equivocado mucho. Boni utiliza el reloj de pulsera para tomar la temperatura y comprueba sorprendentemente que el agua está a 19º. Este niños es un crack.
Los niños se lo han pasado pipa jugando en la playa pero vamos a aprovechar para seguir brujuleando por la carretera de la costa hasta llegar a Saint Trôpez.
Hemos hecho una parada para comer nuestros bocatas en sitio es fabuloso. Hemos encontrado unas rocas salientes al mar que nos han hecho de asientos. Estamos solos en esta calita rodeados de agua, pinos y costa. Los niños han terminado de comer y se divierten mirando cangrejos ermitaños que salen de entre las rocas. Continuamos hacía Saint Trôpez bordeando la costa.
Hemos llegado a Saint Tröpez y aparcado en un parking subterráneos en donde me ha parecido leer que la primera hora es gratuita y las demás a 1,20 euros ¡Sorprendente el precio para el lugar donde nos encontramos! La pequeña localidad está situada en un saliente de la costa y es evidente que antes de representar el lujo y la ostentación fue un pueblo marinero que se dedicaba a la pesca. Ahora de eso solo quedan sus calles empedradas y la arquitectura de sus casas perfectamente conservadas de aquellos tiempos. Paseamos por sus calles pero está invadido de gente, con lo cual, el encanto de este pequeño pueblo se camufla entre el gentío y las tiendas de lujo que se han emplazado cuidadosamente en la mayoría de los bajos de las pequeñas casas. Los pequeños palacetes salteados de alrededor se reservan para Chanel y Dior. Aún así queda sitio para los artistas y artesanos en la parte alta del pequeño pueblo donde se han ubicado los atelier y los talleres. Después del paseo bajamos al puerto para tomarnos unos helados. Nos sentamos en una heladería y nos refrescamos con unos granizados. La camarera que nos atiende es muy simpática y muy paciente, no tanto el compañero que ha venido a limpiarnos la mesa encharcada de granizado que ha tirado Lucía.
Los De regreso al coche, inevitablemente atravesamos el puerto deportivo que es una exposición de yates repleto de ricachones que exhiben hasta la saciedad sus tesoros y su forma de vida. La gente se detiene a observar, nosotros incluidos, y los paparazzis hacen fotografías desde el embarcadero a un personaje de un joven de uno de los yates que entra y sale a cubierta sin cesar. Adrián me pregunta que qué hacen esos señores tumbados en las colchonetas del barco. Yo le respondo que son los dueños de esos barcos. La verdad que la cara de los niños lo dice todo. No entienden el sentido de esa actitud, aunque por otra parte les maravilla la idea de una casa flotante como esa. Yo, interiormente, lamento tanta estupidez, en donde los dueños de esos despampanantes yates necesitan ser observados y admirados por su lujo y riqueza mientras que su corte les halaga incesantemente para chupar (nunca mejor dicho) del “bote”. No estoy diciendo con esto que haya que pedir perdón por ser rico, pero sí por ser neciamente rico. Es cierto que alguno de ellos me puede decir: Si te molesta lo que ves no vengas a Saint Trôpez. Totalmente cierto.
Retiramos el ticket del parking y la bromita de estar paseando por aquí durante dos horas nos ha costado 7 euros. He debido leer otro cartel cuando entré en el parking o quizá la primera hora era gratis paseando. Eso sí, los granizados y los helados riquísimos.

Hay un atasco grande en la carretera de la costa para llegar al camping. Así que, a mitad del camino no nos lo pensamos, aparcamos los coches y nos detenemos en una playa para que los niños jueguen hasta que la carretera se despeje. Se está de miedo, al sol le quedan ya pocos minutos y la temperatura no puede ser mejor.
Son las 9 de la noche y retomamos el viaje para llegar al camping. Ahora ducha,cenita y a la cama.
Jueves, 17 de Julio de 2012
FRÉJUS
Le Chausseres de Baigne

Hoy vamos a estar todo el día en el camping. Los niños quieren aprovechar la piscina porque han visto un tobogán gigante para deslizarse. Por la tarde, prepararemos la salida para mañana e intentaremos mirar algunos campings.

Después de desayunar nos dirigimos los 7 a la piscina. Tiene una puerta bastante blindada que la aísla del resto del recinto. Los niños no pueden acceder solos y para ello se han encargado de situar un pulsador de apertura a una altura razonable. Hemos atravesado un área reservada al juego de petanca. Hay mucha afición por aquí. Está repleto de gente mayor de varias nacionalidades que afinan su lanzamiento para poder ganar. Nosotros, mientras nos descalzamos para acceder al recinto de baño y colocamos las chanclas en unos agujeros destinados para ello, observamos el grado de concentración y la destreza que tienen todos lanzando.
Estamos ya dentro de la piscina y saludamos al socorrista que está en lo alto de un taburete vigilando a los bañistas. Hemos elegido 4 tumbonas para dejar nuestras toallas. Adrián y Alejandro han salido disparados hacia el tobogán. Me doy cuenta que Juancho está hablando con el socorrista y ha puesto una cara extraña. Están señalando a los niños y agudizo el oído. Estamos alucinando. Nos dice que no está permitido bañarse con el modelo de bañador que llevan los chicos. Miramos a nuestro alrededor y, efectivamente, todos los niños y los hombres tienen puesto un bañador de natación. Boni y Juancho le explican que no disponen de otros, ni tampoco los niños. No hay posible negociación, nos insiste que es una ley francesa y no está permitido ese tipo de bañadores por razones de higiene. Se distingue entre bañadores de playa y de piscina y los que mis chicos llevan son de playa. A pesar de insistir su rostro lo dice todo, está terminantemente prohibido, ni siquiera los niños. No nos lo podemos creer. Detrás de nosotros hay unos alemanes que nos comentan que ellos tuvieron que comprar unos bañadores ayer para poder utilizar la piscina. Juancho y Boni han decidido ir a hablar con el gentleman. Muy airosos y enojados se dirigen a recepción para pedir una explicación de todo esto. Yo, aunque no me creo más lista que nadie, ya se la respuesta de nuestro querido amigo. Imagino que ellos también pero ante tanta ridiculez querrán descargar su ira.
¡Y vaya que lo han hecho! Pero ha sido en balde. Juancho le ha exigido leer la ley y nuestro gentleman le ha invitado a abandonar el camping si no le gustan las normas. Por no decir que les ha intentado echar. Al final Boni ha decidido actuar de poli bueno y para evitar más encontronazo ha zanjado la conversación sin sacar nada bueno en claro.
Regresan a la piscina para informarnos que no hay nada que hacer, así que nos iremos a la playa. Pero los niños se han quedado desolados. Ante una situación así hay que ser razonables. Hay un Decatlón cerca del camping, no debemos perjudicarnos por una cabezonería. Los niños quieren estar en la piscina y bajar a la playa no hará más que fastidiarnos el día. ¡Pues hala chicos, todos a compraros un supermodelo de esos que además vais a estar guapísimos!
Mientra los 4 hombres han ido en coche a comprarse sus bañadores para la ocasión, nosotras tres nos quedamos en la piscina refrescándonos y tomando el sol. De momento nuestros bikinis son más higiénicos y no oponen resistencia. Supongo que a nosotras no se nos queda arena de playa en el bañador y por eso no tenemos que usar modelos diferentes. Aunque….. Pensándolo mejor es posible que estén seguros de que las mujeres se lavan y se cambian la braguita todos los días. Sí, eso debe ser. Los franceses lo tienen claro, en la piscina todos con las manos arriba donde el socorrista las vea. El pelo es otra cosa. En la Costa Azul la norma no puede llegar a tanto ¡Qué horror un gorro de piscina podrá ser muy higiénico pero nada elegante para la ocasión! ¿Una norma? sí, ¿de higiene?, también, pero mental.
Después de una hora de espera el desfile no se hace rogar. Los primeros en desfilar Adri y Alex que han elegido para la ocasión el negro con rayas naranjas y rojo con franja azul. Corren como pildorillas hacia al trampolín muertos de la risa acompañados de Paula y Lucía que han esperado como unas campeonas. Detrás los siguen Boni y Juancho. Boni ha decidido ataviarse con la camiseta de la selección española. El bañador de Boni negro y naranja, Juancho no lo ha encontrado más discreto, azul como la bandera de francesa. Los dos se quitan al unísono las camisetas marcando caderas y preguntándole al socorrista si así vale. El chaval no puede ocultar la risa y asintiendo con una sonrisa da el visto bueno. La gente a nuestro alrededor también se ríe. Charlamos con unos holandeses que nos preguntan de que parte de España somos. Somos de Madrid, aunque hoy somos franceses con unos gayumbos de cine.

Después de refrescarnos vamos hacia las cv a comer. Hemos tenido que ir a recepción, pues se ha ido la luz una vez más. Esta vez, le ha tocado al poli bueno (Boni) que cuando fueron a comprar los bañadores todavía tuvo oportunidad de preguntarle al gentleman por el Decatlón mientras éste le enseñaba la norma por escrito. ¡Está de suerte! Pues el monsieur se ha debido de ir a comer y hay una señora mayor que atiende a Boni. Por lo visto le ha costado un triunfo encontrar a nombre de quién estaba la parcela, pues Boni ha intentado todas las combinaciones Reyes Pozuelo, Bonifacio Raposo. Imposible, no figura ninguno de esos nombres. Por un momento Boni ha dudado si no habré sido tan osada de registrar por rapocaravaning porque a pesar de escribirle los dos nombres y apellidos la señora no nos encuentra. ¡Claro ya está! Como Boni ha escrito la z de pozuelo un poco corta, la señora ha leído Potuelo y por supuesto, debe haber una decena de nombres muy parecidos a ése, por lo que es imposible imaginar que Reyes Pozuelo podría ser el nombre del inquilino de la parcela.

Al final la señora ha venido a arreglar la luz. Estamos terminando de tomar café en nuestra parcela y vemos acercarse al monsieur. A estas alturas tenemos los cuatro una relación tan íntima y estrecha que vamos a sellarla con lazos de sangre. ¡Vaya! El vecino de la parcela de al lado tiene el mismo problema con la luz y curiosamente no venía a tomar café con nosotros si no a levantarle los plomos al de al lado. Los 6 amperios deben estar repartidos para los cuatro que estamos compartiendo la toma y mi mirada de soslayo se lo han hecho comprender al monsieur gentleman que ya no se contonea tanto cuando pasa. Aún así le ha dicho a nuestro camarada de parcela que enchufe en la toma que tiene al otro lado. Quizá para que nosotros no le molestemos más y le saltemos la luz con nuestra taladradora y cortacésped. En poco menos de 5 minutos al vecino se le ha saltado otra vez la luz y Boni y Juancho aunque tienen que irse a lavar los platos no se quieren perder el siguiente pase. ¿Vendrá el monsieur gentleman esta vez con un medidor de amperios o con el imperio napoleónico para solucionar el problema?! Qué pena! Boni y Juancho se han perdido la caída del Amperio. Nuestro amigo Gentleman ha tenido que claudicar y le enchufa otra vez el cable en nuestra toma. Mientras evita el contacto con los ojos, una de dos o está enamorado o está avergonzado yo sigo escribiendo concentrada en mi ordenador no sin ¡morirme de la risa! Voilá los 6 Amperios solo. Ja ja.
Todavía queda un contacto inexorable pues tenemos que contratar wifi para buscar algunos campings y reservar mañana. Esto es misión de los chicos. Y ha siso buena idea porque cuando han ido a contratarlo el monsieur gentleman está en la semana fantástica y hemos sido agraciados con ¡La Oferta! Según él. Juancho le mira a Boni y le dice: - Bua! Está de coña! –no, no es oferta ¿Por qué no? Contesta el gentleman, ahora en su no tan perfecto español. - ¿Por qué no? Replica Boni. Muy bien nos acaba de regalar 6 euros por dos horas de conexión. Debe ser que si pasas la prueba del registro más la de los bañadores y la de las 3 reclamaciones de luz te corresponden 2 horas de wifi. Ahora comprendo a Asterix y Obelix.
Después de esta tarde tan divertida por deferencia de nuestro amigo el monsieur gentleman nos refrescamos una vez más en la piscina y un poco más tarde nos conectamos a Internet para poder anotar algunos teléfonos de camping en nuestro recorrido para atravesar Francia. Queremos pasar por Carcassone pero después de las dificultades que nos ponen para reservar y en vista de las pocas garantías de plazas decidimos llegar hasta el departamento de Midi Pirynnes y arriesgarnos y llegar a un camping que está cerca de la autovía para pasar la noche. La señal de la wifi es accesible cerca de recepción donde han habilitado un banco de madera con una pequeña mesa estrecha y alargada para ese fin. La noche está cayendo y nuestro gentleman que ha merodeado por allí sin decir ni mua mientras nosotros trasteamos en nuestros asuntos, se despide de nuestras retinas solo hasta el día siguiente que volverá a asomar a lo lejos evitando un encuentro de despedida, quizá por la emoción. El camping de 6 Amperios y de exquisitas normas de higiene os recuerdo que se llama Les Pins Parasol y está en Fréjus. El nombre del Monsieur no tuve el gusto de conocerlo pero estoy segura que podréis identificarlo inmediatamente, es más, se ve que adora profundamente a los españoles porque le faltó muy poco para recibirnos y despedirse con abrazos. Pues eso todo un gentleman. Au Revoir France!

MarteS 17 de Julio de 2012
FREJUS- MARTRES TOLOSSANE
LE MOULIN

Estamos ya en la autopista y dejamos la costa para desviarnos hacia Carcassonne dirección Toulousse. El viaje transcurre tranquilo y sin ningún problema. El paisaje sigue siendo de viñedos porque atravesamos el departamento de Languedoc- Roussillon. A medida que vamos avanzando los viñedos se transforman en campos de cultivo de maiz y girasol y tierra caliza. A veces, a través de la ventanilla puedes identificar perfectamente los paisajes que Van Gogh perpetúa en sus cuadros.
Hemos hecho una parada para comer en las cvs en un área de servicio que tienen alguna mesa con sombras. Hace calor pero es soportable.
Bordeamos Toulousse para continuar a nuestro destino que no está muy lejos de allí justo 40 ó 50 km. Al fondo los pirineos van haciendo su acto de presencia. Estamos ya en el Departamento de Midi Pyrénnée. Nos desviamos de la autopista, tal como nuestro navegador nos indica. Atravesamos el pueblo al que pertenece el camping Martres Tolossane. Tiene un aspecto castellano en cuanto a su trazo y diseño, casas que se ubican a ambos lados de la carretera principal en donde ninguna desentona en los materiales y ninguna supera una altura apenas. El pueblo parece en fiestas y estamos atentos para que el gps no haga ninguna de las suyas y nos meta por alguna calle cortada o estrecha, Pero pronto lo bordeamos y nos adentramos en un área cada vez más frondosa y arbolada. Vemos el camping al final de una carretera estrecha y estacionamos las dos cvs para bajar a intentar registrarnos.

Ya estamos instalados en dos parcelas fabulosas. El registro ha sido muy sencillo. La joven que nos ha atendido ha sido muy agradable. Enseguida nos ha proporcionado dos parcelas casi contiguas y nos ha explicado todo lo necesario del camping. Verdaderamente el camping está encalvado en lo que debía ser un molino hace tiempo. De ahí su nombre. Tiene un enclave muy bonito. Hay una casa central de piedra, muy señorial donde ahora deben de resider los dueños. Hay una pequeña zona acotada porpor un cable electrificado donde se pueden se encuentran algunos burros y en el otro lado u pequeño corral lleno de gallinas, gansos, pavos y algún pato. El río pasa por el camping y cruzando un pequeño puente te puedes adentrar en un bosque repleto de árboles de diversidad de especies y en donde consta un cartel con una gran variedad de aves que residen en él. Además de una cama elástica que se encuentra situado cerca del corral y la recepción, al otro lado del camping nos encontramos con un campo de futbol, una red para jugar al volleyball y otra para jugar al badmintong.
Son las 6 de la tarde y estamos terminando de establecernos en nuestras parcelas para, una vez acoplados darnos un chapuzón en la piscina. Un señor, de unos 75 años se ha acercado a nosotros para ofrecernos su plaza y así estar aún más cerca pero aunque se lo hemos agradecido hemos rechazado el ofrecimiento porque no lo consideramos necesario. Estamos lo suficientemente cerca y además vamos a permanecer sólo una noche. El señor se ha presentado y nos comenta lo sorprendido que ha quedado cuando hemos utilizado el mover. Él viaja en autocaravana con su esposa que en unos minutos después también se acerca a charlar con nosotros. No habla francés, ni tampoco inglés, a penas unas palabras pero a través de gestos ya sabemos que su destino es Santiago de Compostela. Ellos viven entre Munich y Nuremberg y no conocen nada de España. A través de un plano les explicamos una ruta y les aconsejamos que visiten algunas localidades del Cantábrico en sus paradas hasta llegar a Santiago. A Boni le ha preguntado el señor si es una zona de pillaje porque han tenido alguna experiencia negativa atravesando Francia. Llevan dos bicicletas acopladas en la parte de atrás y hace unos días se las intentaron robar mientras dormían. Les respondemos que pueden estar tranquilos que salvo, mala suerte no es probable que eso les ocurra. En poca menos de 15 minutos hemos conversado tanto y han quedado tan agradecidos que nos invitan a tomar algo en su parcela. Lo aplazamos para más tarde pues los niños están deseosos de pegarse un baño y nosotros, la verdad también. La pareja es encantadora y quiere dar una propina a los niños para que se compren lo que quieran. Nosotros no lo permitimos pero dada su insistencia, al final tenemos que aceptar que entregue a Alex 4 euros para que los reparta entre todos. Es admirable cómo una pareja que debe sumar los 150 años sigue dando tumbos por el mundo con una ilusión una capacidad sorprendente.

Nos hemos dado un baño estupendo. Estamos solos en la piscina, solo nos acompaña, sorprendentemente otra familia española que tiene 2 niños pequeños. Después del chapuzón jugamos un partido de voleyball. Adrián, Paula y yo contra Boni, Juancho, Lucía y Alex. Entre piques, risas, llantos y gritos terminamos el partido. Paseamos un poco más por el camping y luego nos vamos a cenar a las cvs. Preparamos la mesa fuera para tomarnos unas tortillas francesas en honor al pís en donde estamos. Después mientras que los niños ven una película en la cv nosotros nos jugamos una pocha. Son las 11.30 y nos vamos a dormir. Mañana entraremos en España. À Demain!


Miércoles 18 de Julio de 2012
MARTRES TOLOSANE- DEBA
CAMINO DE LA FRONTERA
.

Nos hemos levantado tarde hoy. No tenemos mucha prisa pues tenemos solo 300 km por delante para llegar a Guipuzcoa. Ayer encargamos el pan y estamos saboreando unas tostadas con aceite muy ricas. Los cuatro niños siguen durmiendo en las cvs. Pero ya les estamos espabilando para que se pongan en marcha. No tenemos que recoger mucho porque una parada no da para revolver. Boni le ha dejado la cámara a Adrián y a Alex para que hagan fotos a los animales que hay en el camping.
Pronto enfilamos con nuestros caracoles. Los mover se portan y nosotros ya tenemos un buen manejo con los enganches después de tantas etapas encima. Nos incorporamos a la autopista sentido San Sebastián. De frente, los Pirineos nos anuncian que regresamos a casa, cargados de energía y de experiencias que nos ayudarán a encajar mejor la situación que vamos a travesar todos los españoles en los siguientes años. Vienen tiempos difíciles para todos, tiempos que están condenados a un cambio inexorable de estructura y pensamiento si queremos salir de ésta. Nos hemos divertido mucho y lo mejor, hemos desconectado y hemos aterrizado en otras realidades. En el viaje hemos observado diferentes sociedades occidentales con sus matices culturales que ponen de manifiesto el por qué de nuestra peculiar crisis dentro de Europa. Tenemos mucho que cambiar en Occidente, pero particularmente los españoles, tenemos mucha necesidad de análisis introspectivo para provocar un cambio de pensamiento y consecuentemente de acción. Un cambio psicológico y sociológico en donde cada uno de nosotros tenemos nuestra parte de responsabilidad, no solo los dirigentes políticos y financieros. Al fin y al cabo, es una acción consentida por todos nosotros. Esa capacidad de improvisación y esa alegría y espontaneidad que le ponemos a la vida y que tanto nos caracteriza es un potencial que tenemos que utilizar pero no basta solo en esta ocasión. También hay que aprender a vivir con lo estrictamente necesario para sentirse feliz dentro de un mundo cada vez más cambiante y desarrollado tecnológicamente. La felicidad, un constructo ambiguo y relativo cuya obtención pasa obligatoriamente por respetar la naturaleza y los derechos universales de todos los seres vivos, en donde incluyo al hombre.
En este viaje que va a durar 25 días ya, he montado y desmontado la cv más de 10 veces, he lavado platos, he compartido duchas, lavabos, lavadoras y un sin fin de labores, no solo con mi familia si no con el resto de los campistas. He procurado mantener las instalaciones en óptimas condiciones para poder compartir con los demás y además mis hijos y mis sobrinas, una generación a la que le toca salir adelante de este atolladero, se han nutrido de esta experiencia y han colaborado al máximo participando en ello. He necesitado Internet, por supuesto, pero no necesariamente más de 3 ó cuatro días a lo sumo y lo más importante he compartido veladas, tertulias con mi familia e intercambiado impresiones con otras personas de cualquier parte del mundo que me recuerdan a cada momento que hay muchas maneras de entender la vida. De todas ellas, me quedo con las que tienen en común el respecto por el medio ambiente, por las demás culturas, la ausencia de prejuicios y estereotipos y la buena voluntad para cooperar entre todos. Mis vacaciones han sido un resort de 5 estrellas porque regreso con las fuerzas renovadas y la motivación necesaria para levantarme y empezar de nuevo las veces que tenga que hacerlo, y por supuesto, para reflexionar y ejercer la autocrítica siempre que sea necesario. Soy un ser dinámico y cambiante que huye de los esquemas rígidos, estrictos y absurdos en los que hemos encajado a esta sociedad actual.

Ya estamos llegando a casa, quedan solo 40 km para atravesar la frontera. Siempre es gratificante llegar a casa, los padres, los amigos, el aperitivo, la shandy, El Cantábrico, Los Pirineos, el Mediterráneos,…..!El jamón que no se si nos dará ya para el de bellota!

Vamos a permanecer en Deba (Guipuzcoa 4 días) disfrutaremos de la costa y de su paisaje al máximo. De los pinchos todo lo que la cartera nos permita, que será poco a estas alturas.

Estamos atravesando el último departamento de Francia, el Pirineo Atlántico. A ambos lados de la carretera campos de maíz y frondoso bosque me van avisando de que nos acercamos a territorio español. Dejamos atrás muchas aventuras y sensaciones que como dije al principio han sido un placer para los sentidos. Del gusto me quedo con el chocolate y el queso de Gruyères; de la vista con el Jungfrau, el glaciar del Ródano ,las catedrales del Duomo en Siena y Florencia y el azul de la costa francesa; del olfato los olores de las flores en el valle de Lauterbrunen; del oído con la estrepitosa caída de las Trümmellbach y ¿del tacto? Me hubiera gustado dar un par de soplamocos a alguno en ciertos momentos, pero bueno, bromas a parte, eso es otra historia, seguramente que Adrián, Alex, Paula y Lucía nos describirán bien el tacto de los conejos de Beatenberg y de los corderitos y cabritas de la Ferme du Villard. En cualquier caso, todos nosotros nos quedamos con el tacto de la Roja para marcar los 4 goles y proclamarse Campeones de Europa y yo, personalmente con el tacto al volante de mis dos superconductores que nos devuelven sanos y salvos a casa.

En estos momentos acabamos de superar los ¡5000 km de viaje!. Eso es lo que tiene la cv, que engancha. Ahora, a pensar en el próximo viaje.

El secreto de la Tortugas- Maldita Nerea
“Ahora estamos camino de la frontera disfrutando a sorbitos la vida entera… Y si seguimos con el plan establecido nos cansaremos al ratito de empezar. Probablemente no encontremos el camino pero nos sobrarán las ganas de volar,……Qué fácil es perderse de la mano, madre mía agárrate, que el vacío de ese vaso no se llena si no vuelves tu a querer. Como no me voy a cansar si no paro y no dejo de correr. Improvisemos un guión definitivo que no tengamos más remedio que olvidar y de hacer de todas las estrellas el camino, para que nunca falten ganas de soñar… Solo tenemos que perder velocidad. Cuenta hasta tres que empiezo yo primero y ya me sigues tu…Nadie se hará el camino sin suerte, que aquí lo malo en algo bueno se convierte y la pena en pedacitos se convierte.. Existe un sendero, así que empiézalo conmigo! y echaremos a volar!. Te aguarda un mundo entero no le hagas esperar”

5 comentarios:

  1. Vaya vaya... lo has contado tan detallado que es como si lo hubiera vivido con vosotros.

    Seguid así y tratadme bien a Boni y Juancho. ¡Qué héroes!
    :-)

    Hasta pronto

    ResponderEliminar
  2. Madre mía chicos, esto sí que es un bloig "al minuto" de vuestras andanzas...
    Sólo falta saber cuántas veces hacéis pis... Que noooooooooooooo, no se os ocurra incluirlo! :-)
    Menuda experincia, no? Y lo que os queda...
    Seguid disfrutando, y mucho cuidado con esas traicioneras carreteras, lo digo por las maniobras de las Cvs!!!
    Besos de Los Trives

    ResponderEliminar
  3. Bueno Boni, intentamos llamarte y hemos pensado qué mejor forma de felicitarte y que lo recibas, que a través del blog...
    FELICIDADES DE PARTE DE TODOS LOS TRIVES!!!
    Muchos besos y que sigáis disfrutando así!!!

    ResponderEliminar
  4. Aixxxx que recuerdos suiza!
    Me lo apunto para cuando vuelva para pasar por la toscana.
    :)

    ResponderEliminar
  5. Siempre hay una excusa para regresar a un lugar. Gracias por leernos
    Un abrazo

    ResponderEliminar